Pero, te amo (4/7): los genitales locos de Danilo - Las Bolas de Pablo

Lo mƔs nuevo

15 jul 2014

demo-image

Pero, te amo (4/7): los genitales locos de Danilo

m1_768_fernanda_urrejola_11
CONTIENE:
-SEXO HETEROSEXUAL
-BALLBUSTING HOMBRE/HOMBRE



Cuando Danilo se retiró de la sesión de fotografía entre Carlos y Ana, y dejar terriblemente golpeado al abogado, este anunció que lo demandaría. Así que Ana no deseando que el problema pasara a instancias mayores empezó a emitir opiniones con el hombre que continuaba agarrÔndose los testículos.
—no debes demandarlo, es lo que Ć©l desea.
—voy a demandar a ese cabrón, me golpeó, estoy sangrando.
—ya te curarĆ©.
—”no! Me voy a demandarlo.
—escĆŗchame. Ɖl estĆ” celoso porque ahora estoy contigo, soy tu novia. Me divorciarĆ© y serĆ© completamente tuya, si lo demandas se pondrĆ” peor y creerĆ” que eres un cobarde...
—cobarde no soy.
—EscĆŗchame amor —dijo limpiando con una toalla la nariz rota—, debes enfrentarlo. No quiero que lo demandes, enfrĆ©ntalo como todo un macho que eres, date a respetar. Haz que me respete.
.com/blogger_img_proxy/
Carlos miró al suelo tornÔndose pensativo, su entrepierna le dolía terriblemente, acariciaba sus huevos con pesar.
—demandarlo serĆ­a tu peor error, una burla para Ć©l. Danilo es el tipo de hombre que aprende por los golpes. Y tĆŗ tienes una buena musculatura.
Carlos  sonrió dejando que la mujer le palpara el pecho y los brazos.
—¿lo demandaras?
—le darĆ© una golpiza que no olvidarĆ” el resto de su vida.
Ana sonrió y abrazó a su novio, se sentía tan excitada luego de ver a aquellos hombres luchar, le dio un cÔlido beso a Carlos y le tocó el cuerpo, su sangre, el sudor, aquel olor a hombre que emanaba. Carlos puso una mano en la cadera de Ana.
—amor, amor... ahora no. Me duelen las pelotas.
Ana dio una sonrisa amigable.
—te curarĆ©.
...
Danilo estaba herido como macho, aquel monsalvete era como un huevo sin sal, como la importancia del número cero o el color gris. Distaba mucho de él, que era fuego puro. Con esa golpiza sabía que le tendría miedo y abandonaría a Ana. Al salir del estudio fotogrÔfico fue a su taberna favorita y se bebió varias cervezas.
...
En los días sucesivos intentó comunicarse con Ana, iba hasta su casa, al trabajo, la llamaba al teléfono y todo resultaba fallido.
—¿Que le pasa al pelirrojo mĆ”s lindo de la ciudad? —preguntó una de sus empleadas una maƱana al entregarle un documento de varias motocicletas.
—Enojado con la vida —le respondió apretando con furia una pelota de goma.
—Pero Āæpor que? —quiso saber la mujer, ahora situĆ”ndose tras su asiento y haciĆ©ndole un masaje en el hombro hasta bajar lentamente al pecho.
—me irrito cuando las cosas me salen mal
—no, mi amor, tĆŗ eres la perfección.
Danilo se paró con sigilo de la silla, la tomó por el cabello con fuerza y ella gimió. Enseguida la arregostó contra la mesa frotÔndole la entrepierna como un depravado sexual. La mujer gemía excitada sedienta de sexo.
La mujer a la que llamaremos Victoria le quitó la camisa al pelirrojo, se besaban en los labios, unían sus lenguas. Ella dejó caer la camisa al suelo y le lamió el abdomen al hombre, él tenia una potente erección en el pantalón que le marcaba un adorable tumulto en el jeans. Victoria lamía una tetilla, luego la otra, subió a la boca sintiendo como le apretaban el culo. Danilo estaba amargado y falto de sexo, y de un solo jalón le arrancó la blusa dañÔndole los botones.
—”no me reclames! Ya resolveremos eso.
.com/blogger_img_proxy/
Y le lamió la superficie del seno, ella se quitó el sujetador y Danilo le olisqueó las tetas dÔndole besos y lamidas. Metió una mano dentro del pantalón tocÔndole el clítoris, Victoria cerró los ojos y lanzó un gemido de caliente orgasmo, le chupo un pezón, después el otro mientras la masturbaba con los dedos de la mano, ella exclamaba como actriz porno.
Victoria extasiada se apartó de Danilo:
—calma... calma.
Danilo saco la mano del pantalón mostrando los dedos llenos de un líquido corporal y lo limpió con la boca. Victoria controlando la respiración se abalanzó contra él, cayendo juntos en una silla. Le lamió el cuello, bajo al pecho y se detuvo en la entrepierna del macho.
—uf —dijo Victoria pasando el dedo por la verga del hombre, se la agarró a travĆ©s del pantalón frotĆ”ndola.
—ajaja, asĆ­, asĆ­... AsĆ­ mamacita, sĆ”cala y chĆŗpala
Victoria abrió la cremallera y saludó al gran monstruo con vellos rojizos, se posicionó para besarle la polla con los ojos cerrados. 

La chupaba moviendo la lengua, pasƔndola de un lado a otro de la boca. Danilo colocaba los ojos entrecerrados, jadeando. Parecƭa un seductor actor porno.
Victoria abrĆ­a la boca tragĆ”ndose entera la verga, Danilo aumentaba los jadeos, la mujer se concentraba en lamerle las pelotas llena de espesos vellos rojos. Regresó a la punta del pene y le lamió la cabeza, en un solo instante sintió el caliente nĆ©ctar del macho sobre la lengua.
...
Danilo terminó llevando a la potencial y confianzuda secretaria hasta su departamento y fornicaron como los animales, en la sala, cocina. Por último la habitación, donde durmieron hasta la mañana siguiente, donde Danilo fue despertado por el insistente timbre en la puerta.
—”ay, pero quien demonios toca asĆ­!
Salió de la cama en bóxers dejando a Victoria durmiendo. El timbre seguía sonando, seguro era una emergencia. Caminó a la sala y abrió asomando la parte superior del cuerpo.
—¿quĆ©?...
Enseguida recibió un puñetazo en la cara que lo hizo retroceder y caer, confundido vio la imagen de Carlos frente a él.
—”idiota!
Carlos se rió con sarcasmo.
Danilo intentó levantarse, pero Carlos lo devolvió nuevamente al suelo de un sonoro puƱetazo. 

Danilo miró con odio y le gritó un insulto, su cuerpo fuerte y esculpido estaba siendo derrotado por ese abogado idiota, ademĆ”s estaba en bóxers. Y Carlos,  viĆ©ndolo de piernas abiertas le pateó los cojones.
La boca de Danilo se abrió con una gran "O" cuando sus adoradas pelotas eran puestas entre la punta del zapato y la pelvis, únicamente pudo emitir un ronco gruñido.
—¿te dolió pelos de zanahoria?
Danilo no respondió nada, continuaba pÔlido en el piso agarrÔndose los huevos. Carlos se inclinó sobre él, lo levantó del pescuezo y lo lanzó contra el sofÔ, el gran Danilo cayó indefenso.
—¿quĆ©? ĀæNo te sientes tan fuerte como ayer?
Danilo gimió, y Carlos le pego en la cara, al instante se centro en sus testículos, el pelirrojo intentó defenderse, pero Carlos pudo apoderarse de las pelotas apretÔndolas con los dedos. Danilo se desesperó haciendo un quejido y contorsionando el cuerpo.
.com/blogger_img_proxy/
Entonces, lo soltó de las bolas, lo agarró por el hombro y lo estampó contra la pared. Danilo se pegó en la espalda y la cabeza quejÔndose del dolor. Carlos furioso, saltó en su entrepierna.
—”AAAAARRRHHGGGGGG!
—con esto aprenderĆ”s a no meterte conmigo, soy un hombre pacifico, pero violento si tĆŗ lo quieres— y abandonó la estancia dejando a Danilo en el piso agarrando los testĆ­culos que se amoratarĆ­an.

1 comentario:

  1. blogger_logo_round_35

    Amigo ya hiciste muchas de hombre vs hombre, ahora podrias hacer una mujer/hombre , algo asi como un torneo de karate mixto. O una discucion entre pareja que la mujer muestre qien manda agarrandole de los huevos

    ResponderBorrar

Pages

undefined