Un hombre llamado Oscar - Las Bolas de Pablo

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2 ago 2012

Un hombre llamado Oscar

Oswaldo habĆ­a publicado en internet su interĆ©s por conocer a un hombre que deseara practicar ballbusting, hubo muchos interesados, pero solo uno le pareciĆ³ agradable durante las semanas que estuvo chateando con los pretendientes, Oscar, un atractivo hombre de 30 aƱos de edad, bombero de profesiĆ³n, con cuerpo de dios griego, una sugestiva barba que invitaba al sexo, y muy intelectual de esos que en la universidad se iba por la calles bohemias, aunque nunca termino sus estudios y ahora los ejercĆ­a de noche. Hablaron mediante Messenger y se conocieron, decĆ­a ser activo sexualmente y que disfrutaba golpear los testĆ­culos mas no ser golpeado. Se citaron un dĆ­a y simpatizaron al instante, invito a Oswaldo a tener sexo con Ć©l, oferta que el joven no rechazo y fue a la cama al instante con Oscar, experto en tocar con las manos y estimular el cuerpo, tenia un pene grueso mas no largo, sus bolas bailaron con el movimiento de su cuerpo y su culo enamorĆ³ a Oswaldo al tenerlo carnoso y grande, no tuvieron sesiĆ³n de ballbusting, pero el dĆ­a de la practica, no tardo en llegar una tarde a la casa de Oswaldo.

"¿que prefieres? ¿Patada, puƱetazos, apretĆ³n?" PreguntĆ³ Oscar sonriendo con sus dientes blancos cuidados por ser metrosexual, y por el odontĆ³logo.

"todo lo que tu quieras, pero cuando te diga que no resisto mas. Es porque ya no puedo"

"comprendo" acepto Oscar acariciando el pecho de Oswaldo, era tan distinto a Miguel.

Comenzaron a desnudarse, por primera vez Oswaldo tendrĆ­a sesiĆ³n de ballbusting con otro hombre que no fuera Miguel, y Oscar a diferencia de su "enamorado" no pensĆ³ en quedarse solo en jeans, quedo semidesnudo como Oswaldo, Oscar tenia piernas de futbolista, muslos duros y un paquete dentro de la ropa interior blanca que parecĆ­a ser de un grosor descomunal, y en realidad lo era, pero en cuestiĆ³n de llevarlo al cielo, era capaz de enviarlo al espacio de un solo orgasmo.

"no quisiera recibir un rodillazo de esas piernas" sonriĆ³ Oswaldo sintiendo la excitaciĆ³n de que en verdad seria golpeado por ellas

"practico mucho fĆŗtbol" confirmo Oscar

Oswaldo abriĆ³ las piernas, vio como Oscar se mojaba los labios mirando la entrepierna del joven, calculando como sus golpes impactarĆ­an en las 2 bolas que estaban envueltas en el apretado bĆ³xers rojo. Se acerco al muchacho, entonces lo complaciĆ³ agarrĆ”ndole de los hombros y clavĆ”ndole su dura rotula en los dos frĆ”giles huevos, aplastando sus bolas entre su rodilla y la pelvis. Oswaldo soltĆ³ un grito y cayĆ³ al suelo.

"Mis pelotas... ahhh... Oscar... ahhh ... ay ..." se quejaba Oswaldo sintiendo el dolor quemante pasar de sus cojones a todo el cuerpo y sintiendo su pene endurecer, en realidad las piernas de Oscar parecĆ­an de jugador de fĆŗtbol profesional "Mis bolas... ay..." decĆ­a sobĆ”ndose las gĆ³nadas con dolor.

Oscar tambiĆ©n tenĆ­a su pene duro y no lo ocultaba dentro de su ropa interior, y es que se le salĆ­a. Estaba muy orgulloso de no ocultar su erecciĆ³n, miro a Oswaldo y observo como el pene duro del joven parecĆ­a el tronco de un Ć”rbol en su prenda intima. Pasados unos minutos, Oswaldo se paro del suelo todavĆ­a sobandose del dolor, masajeando sus hĆ¼evas.

"creo que podemos continuar" confirmo

"¿estas bien?"

"Esa rodilla de que es devastadora, lo es. Pero podemos continuar. TodavĆ­a me duele un poco, pero sigamos que me gusta"

"se ve muy bien que te gusta" sonriĆ³ Oscar dirigiendo su mirada a una mancha que salĆ­a del pene de Oswaldo y mojaba la tela roja

"oh si" confirmo sin pena Oswaldo

Ferdinando Valencia

Oscar volviĆ³ a sonreĆ­r, apretĆ³ los puƱos y le dirigiĆ³ 2 golpes a los huevos de Oswaldo con la mano derecha y con la izquierda.

"Oohh" se quejĆ³ Oswaldo. Oscar le propinĆ³ otro puƱetazo y Oswaldo se quejĆ³ mĆ”s fuerte "ahhhhhhh" tratando de mantener el equilibrio y no caer al suelo

RecibiĆ³ 5 puƱetazos mĆ”s, pero no aguanto al sexto y cayĆ³ al suelo, sobĆ”ndose las bolas con las dos manos.

"¿podremos seguir? me siento excitado"

"si, podemos seguir Oswaldo… ¿pero desde el suelo?"

Oswaldo se levantĆ³ de nuevo, Oscar se echo hacia atrĆ”s, pero Oswaldo sintiĆ³ miedo, pero querĆ­a ir mas allĆ” de sus limites vio con terror como Oscar levantaba la pierna hacia atrĆ”s, pasados pocos segundos, la pierna de Oscar saliĆ³ impulsada hacia adelante y golpeo las dos bolas del muchacho que subieron por todo el escroto hasta pegar contra la pelvis y seguir siendo aplastadas por los dedos contra los huesos de la cadera.

Oswaldo gritĆ³ de dolor, doblo las rodillas y se sobo las bolas, paralizado, sin caer al suelo, con los ojos vidriosos, y a punto de llorar, Oscar sonriĆ³ y le volviĆ³ a patear sin dejar transcurrir muchos segundos, aunque sus bolas estaban siendo protegidas por sus gruesas manos, igual fueron golpeadas, Oswaldo volviĆ³ a gritar y esta vez si cayĆ³ al piso rodando de un lado a otro, a punto de eyacular sin control, sobando sus vulnerables cojones, tardo 7 segundos mas en humedecer la tela de su bĆ³xers emanando un viscoso semen que brotaba de su polla, Oscar lo miro y sonriĆ³, se arrodillo a su lado y le quito la prenda intima, metiĆ©ndose la polla en la boca y chupĆ”ndole el jugo blanco que brotaba.

"rico..." dijo cuando Oscar se apartaba de su pene y se limpiaba el jugo de su barbilla que quedo con pegajoso semen de Oswaldo

"sabe como... cĆ­trico" catalogĆ³ Oscar, Oswaldo se limito a sonreĆ­r "por favor..." dijo el hombre y le hizo dar media vuelta a Oswaldo en el suelo, el muchacho quedo boca abajo sobĆ”ndose las bolas, mientras Oscar se quitaba la ropa interior y se montaba sobre Ć©l con el grueso pene erecto.

La gruesa verga de Oscar se abriĆ³ paso entre las nalgas de Oswaldo, el joven grito cuando entro de golpe, Oscar comenzĆ³ a penetrarlo con movimientos lentos y serpenteantes, cuando hubo soltado toda su carga de semen en todo su ano, se desplomo en el suelo a su lado jadeante y envuelto en fascinante sudor.

"¿quieres venirte a vivir conmigo?"

"No... No lo se..." contesto Oswaldo "dƩjame pensarlo, reciƩn te estoy conociendo"

Oscar quedo pensativo un momento

"entonces... me podrĆ­as dar la respuesta ahoritita mismo... ¿aceptas ir a comer una pizza?"

"¿A comer pizza? Jajaja ¿Ahora?" preguntaba Oswaldo

"Si..."

"esta bien... comamos”
¿TambiĆ©n aceptarĆ­as baƱarte conmigo? ¡Ahora!”
“bueno… si”
“salgamos a baƱarnos, y vamos a comer pizza entonces"

3 comentarios:

  1. hola!! en otras oportunidades ya dije que me encantan tus historias. Realmente me gusta como escribĆ­s, los detalles, todo.

    TambiƩn aprovecho para volver a pedir historias de Pitbull ;) gracias!

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  2. Hola Martin, gracias por comenzar. En 2013 habran 3 nuevas series, como la de el guardaespaldas, yugo o el heredero. Bueno esas son las del 2012, pero en 2013 habras 3 nuevas, entre esas Pitbull

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  3. Genial, me alegra saber que Pitbull estarƔ presente. LƔstima que falte tanto para el 2013 :( habrƔ que esperar...

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