Mi sueño imposible

ORIGINAL: ZATN

Contiene Ballbusting HOMBRE/HOMBRE.

   ...No pude evitarlo, las ganas de desquite eran demasiadas!, así que dejé ir mi pierna hasta el fondo, y mis guayos impactaron el prominente bulto entre las piernas de Arturo.

   Arturo es un joven de 19 años, compañero mío en la universidad, ambos estudiamos Administración de empresas...Oh pero que torpeza la mía de no presentarme, Mi nombre es Alberto y con 19 años recién cumplidos, he tenido una vida de altas y bajas sentimentales...soy homosexual!,  y si bien he tenido parejas...estos no han durado más de 3 meses conmigo.

   Pero este semestre en la Universidad, conocí a Arturo...un hermoso espécimen masculino que con unos preciosos ojos, un físico atlético y una pronunciada manzana de adán...es el arquetipo del hombre perfecto para mí.

   Y tenía la ventaja de poder verlo en los vestidores, incluso en toalla tras bañarse después de entrenamiento del futbol.

   Se convirtió en Mi Sueño imposible, El único problema...le gustan las chicas.

   Toda una "manada" de leonas hambrientas andan alrededor suyo, como esperando arrojársele encima...evidentemente como actúan  las leonas en el áfrica salvaje.

   Pero de seguro ante tanta abundancia de carne a su alrededor, Arturo no se decidía con ninguna, bueno para el público, porque de seguro en privado se acostaría con una diferente cada noche sin  que las demás se enterasen.

   Como ya les dije, Arturo es un dios hecho hombre con ese maravilloso físico, pero lo más llamativo y degustable a la vista es en mi humilde opinión…su pronunciada entrepierna.
Arturo es dueño de un paquete de proporciones bíblicas, con mi visión de “rayos X”, he podido percatarme de que su verga a pesar de estar siempre en reposo, es de un tamaño más que llamativo…tremenda salchicha tiene!;Pero es también cierto que la mayor parte del bulto en reposo entre sus piernas corresponde al saco contenedor de testículos que Dios le dio.

   Tiene las bolas enormes…y de seguro le estorban al caminar y más al correr…me excito de pensar en cómo esas gordas bolas se menean entre sus musculadas piernas. Adoro admirar el bulto permanente en el pantalón.

   Traté  como pude de resistirme  a su tentación, pero mis instintos ganaron y me le insinué…la obvia respuesta, un frio rechazo y una incómoda mirada de su parte cada vez que estaba cerca de él…
…agradecí que no fue un patán completo y hacer público mis sentimientos…guardó el secreto, pero eso no redujo la incomodidad cuando estaba junto a él, no sé porque pero su rechazo me generó frustración, la creía leve, pero cuando en un partido de fútbol ambos nos encontramos en equipos rivales…esa frustración se convirtió en afán de desquite…quería de alguna forma hacerle sufrir…y cuando ambos caímos al suelo durante la lucha por el balón, pude ver su abultada entrepierna tan cerca de mi pie…que fui malintencionado y estire la pierna para darle un cobarde golpe bajo.

   Fue una forma de desquite, pero  a la vez, un deseo de tocar esas viriles áreas masculinas.

   Y así regresamos al inicio de este relato… el momento de seguramente mayor dolor en la vida de Arturo.

   Un ensordecedor grito me avisó que había golpeado las bolas y no el pene, quede mirando sus reacciones... Arturo se retorcía de un lado a otro, con las manos en la entrepierna, los testigos aparecieron en escena y yo fingí con talento teatral mi sorpresa sobre lo que sucedía.

   Hipócritamente pedí disculpas mil veces y la mayoría creyó mi excusa, pero dado lo violento del golpe y la sensible área golpeada, vi el cartón rojo y me retiré del campo. Desde la lejanía observe como el entrenador, que conocía de primeros auxilios revisaba el área pateada, a la vez que no cesaban de empapar el rostro de Arturo con  una esponja húmeda sin duda para que reaccionara más prontamente.

   Ante la insistencia de los testigos, me retiré por completo del sitio, no sin enterarme luego por comentarios que Arturo se había repuesto con dificultad y hasta logró regresar al partido, no sin molestias.

   Al día siguiente todo pareció normal, por mi lado me acerque a Arturo y le pedí unas pendientes disculpas por el “accidente”. El parecía haber reaccionado bien.

   Otra cosa muy diferente sucedió a la salida de la universidad, Arturo se me acercó y me pidió le acompañara, pues tenía algo importante que decirme; Intrigado y confiado en que el incidente estaba superado fui tras él, hasta una calle, bastante sola que la mayoría evita a la hora de la salida.

   Cuando le pregunté el motivo de su extraña petición, un fuerte puñetazo impactó en  mi rostro, haciéndome torcer la boca y aflojarme la dentadura.

   Era obvio que Arturo se estaba desquitando por el golpe dado bajo, y que no lo  consideraba un accidente….con cada golpe, me reclamaba por golpearlo ahí abajo y resumía lo doloroso que había sido para él.

   Ahora el dolor estaba en mi persona, no podía defenderme, él era mucho más corpulento y fuerte que yo, y me había tomado totalmente por sorpresa…
…mi rostro era su principal blanco, me hizo sangrar por nariz y boca, para darme finalmente un tremendo gancho que me hizo escupir toda la saliva de la boca…incluso creí haber escupido un diente, pero mis piezas seguían en las encías, aunque ahora si flojas.

   Finalmente quedé en el suelo, con los ojos tan hinchados que apenas podía ver a mi agresor

   Consciente de que me había dado una buena paliza, no se retiró…no!, a continuación se dedicó a insultarme, pero a pesar de la escasa vista logre divisar que para insultar  se había colocado justo frente mío, casi debajo de mis piernas extendidas...

   En mente crecía el enojo!, quería devolverle el castigo y viendo su posición supe que sólo podía hacer una única cosa…. y no dudé en hacerlo!.

   Apunte como pude y mi pie ascendió hacia su ingle con toda la fuerza de mi pierna!...en esta ocasión no lancé la patada conteniéndome…le arrié tremenda coz digna de cualquier equino.
…Una vez más un alarido suyo me informaba de mi acierto.

   De inmediato traté de adoptar una posición más defensiva, pues si bien le había causado un gran dolor, y me conformaba con eso como desquite…daba por hecho que me remataría, pues él se encontraría mejor que mi apaleado cuerpo.

   De repente vi una sombra moverse a un lado mío, y un impacto me hizo volver la cara a mi izquierda para saber que era…Y ahí estaba!...Arturo derribado junto a mí!.

   Veía borroso pero pude observar sus blancos y grandes dientes apretados, y el rostro contraído del dolor.

   Fue más de lo que había esperado...es más, de no ser un varón de cojones tan grandes, de seguro hubiera fallado mi patada; Y para desfortuna sus grandes y colgantes naranjas resultaron ser extremadamente sensibles al dolor.

   Ahora era yo quien por lo menos podía moverse, y en mi mente surgió un pervertido pensamiento al que le di rienda suelta; Aproveche su indefensión y me coloqué encima de él, con las manos separe las suyas con una facilidad increíble…vaya que estaba debilitado, y sin más le toque el pronunciado paquete genital…
…sin ningún reparo la retiré el pantalón, a lo que él sólo emitió un quejido por el dolor, le siguieron sus pantaloncillos y pude ver su flácido y rosado pene, junto a esas colosales huevas…las más grandes que había visto en mi vida.

   Sin el menor recato, le acaricie las bolas, apartando fácilmente sus intentos de cubrirse….no di más espera a mi plan y me deje caer de cara hacia su ingle
Descaradamente engullí su pene flácido, que apenas sintió el calor de mi experta lengua palpitó, y en un dos por tres me encontraba chupando un grueso y venoso miembro viril.

   Su rechazó al sexo oral se manifestó en un intento de su mano por alejarme, pero decidido a llevar el asunto hasta el final, con una mano le tomé los testículos!….de inmediato alejó su mano entendiendo que si insistía, se ganaría un apretón testicular…
…Y eso en las terribles circunstancias en las que se hallaba, sería su fin!.

   La situación se desarrolló sin más interrupciones y mi masaje lingual lo dejó paralizado de lo rico…ya no mostraba resistencia a mis caricias y no pudo negar un inicio de jadeo que me alegró mucho.

   Y llegó el momento de una erupción volcánica, donde su rígido y grueso pene explotó en un charco de hirviente semen; Me hice a un lado evitando ser salpicado para regresar entonces y realizar una pulcra labor de limpieza.

   Cuando terminé mi cometido, creí necesario emprender la rápida huida, me incorporé y le dije que cuando quisiera estaba a sus órdenes para repetirle la “dosis”. En su rostro sólo vi dolor y placer, no rabia… no temía en ese momento ninguna consecuencia para mi….se notaba que le había gustado el sexo oral… quien sabe, tal vez ninguna chica se lo había hecho antes, o por lo menos no tan bien como yo.

   En casa analicé todo lo sucedido, y me convencí de que había sido una completa locura chupársela….decidí por mi bien físico  no ir a la universidad al día siguiente…de seguro Arturo ya estaría repuesto y con ganas de superar lo que le había hecho….y que mejor forma de superarlo que darme una nueva paliza…sin duda peor para enseñarme no sólo a no pegarle bajo el cinturón, sino principalmente para dejarme claro su heterosexualidad…
…estoy acostumbrado a que los “machos”, sólo dejan claro su condición de varones usando la violencia…y con mi rostro hinchado no tenía ganas de ser nuevamente su saco de golpear.

   Esa misma tarde tuve que ir a la universidad por cuestión diferente a la académica, pero eso sí!, me deslicé por entre la gente y evité toparme con mis compañeros de clase, ocultaba lo más que podía mi rostro hinchado para que la gente curiosa no preguntase que me había sucedido.

   Ya salía de la universidad sin incidentes, cuando en un pasillo solitario vi que alguien iba tras de mí con prisa por alcanzarme, alcancé a voltear y era Arturo que se acercaba a mi persona con cara más que seria.

   Me vi perdido, apreté los puños pero no alcance a levantarlos cuando ya lo tenía a centímetros de mi cara. Por instinto cerré los ojos, y de mi boca iba a emerger un lastimero y desesperado “En la cara no!”…
…Pero no alcance a hacerlo cuando me tomó del cuello y  me estrelló contra la pared....ya esperaba el primer golpe...cuando sentí un contacto en mis labios...
…No podía creer que ocurría!, era la propia boca de Arturo la que ocupaba mis labios...Me encontraba estupefacto, y más cuando su caliente lengua se fundió con la mía.

   No podía creerlo!, Arturo me daba el más glorioso beso de mi existencia!.

   Glorioso pero no largo!, pero sin duda dado por unos nacientes sentimientos de gusto ante lo experimentado el día de ayer….esa era la única explicación posible.

   Cuando nuestros labios se separaron le pude ver frente a frente el rostro….más bello que nunca, Y que hice?...Nada!, Estaba perplejo!

   Arturo no emitió palabra alguna…solo me sonrió y se alejó!; Seguía petrificado ante lo que había ocurrido…no daba fe a lo sucedió, pero la sensación en mis labios no dejaba lugar a dudas…
…Una sonrisa esperanzadora surgió en mi aun hinchado rostro…Le gustaba a Arturo!.

   Mi sueño imposible se volvía realidad…ahora estoy súper feliz, Y desde mañana buscaré consolidar esta nueva e inesperada relación.

Fin.

Gracias

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