Todo sobre mi padre (4/5) - Las Bolas de Pablo

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4 dic 2016

Todo sobre mi padre (4/5)

CONTIENE  Ballbusting  F/M.

   Hola de nuevo soy yo, Alicia; Ya se enteraron de las aventuras con mi Padre hace 3 dĆ­as, y 1 dĆ­a, ahora les contarĆ© los sucesos ocurridos hace 2 dĆ­as.

   Como les dije antes, esta narraciĆ³n no irĆ­a en orden y el motivo es que hace dos dĆ­as hable con mi madre, y si bien surgieron datos Ćŗtiles, no fueron muchas las respuestas que me dio, especĆ­ficamente sobre el golpe bajo a mĆ­ PapĆ”; Pero luego de contarles sobre ello, sabrĆ”n lo que hoy acabĆ³ de saber de boca de MamĆ”, a quien volvĆ­ a interrogar y esta vez sĆ­ se despachĆ³ en detalles…especialmente perversos e Ć­ntimos de su proceso de divorcio con mi querido Padre.

   Bien aquĆ­ vamos en la tercera y Ćŗltima entrega de informaciĆ³n:

HACE DOS DƍAS.

   Muy temprano, me le acerque a MamĆ” y le dije que querĆ­a hablar cosas sobre el divorcio con mi Padre hace 8 aƱos.

   MamĆ” se mostrĆ³ molesta y respondiĆ³ que eso era algo para olvidar, La conversaciĆ³n iba similar a como  siempre habĆ­a sido al tratar el tema. Ella se limitaba a decir que PapĆ” le fue infiel y por eso terminaron.

   Le deje claro que eso era insuficiente para mĆ­, habĆ­a llegado el dĆ­a de saber detalles de la ruptura de mis Padres. MamĆ” se puso colĆ©rica y me reclamĆ³ por hacerla recordar malos momentos.

   Pero como siempre iba con un as en la manga, y este era la confesiĆ³n que le hice hace un tiempo del inicio de mi vida sexual…como hija habĆ­a confiado a mi madre ese secreto, y como respuesta querĆ­a que ella me devolviera la confianza con un tema que por ser su hija, tenĆ­a derecho a saber.

   Bien podĆ­a quedarme sin saber que ocurriĆ³, pero la curiosidad me corroĆ­a y debĆ­a saberlo todo!.

   MamĆ” tuvo que ceder.

   “De acuerdo…que quieres saber?”.

   “Como te fue infiel PapĆ”?, como te enteraste?, y sobre todo…como lo confrontaste?”.

   “Todo comenzĆ³ cuando una  buena amiga de la oficina de tu Padre, me hizo un comentario sobre las veces que tu PapĆ” llegaba tarde, y salĆ­a de viajes de fin de semana sin haber compromisos de la empresa…

   …Un dĆ­a decidĆ­ dar crĆ©dito a las sospechas, Ya  antes una dizque amiga me habĆ­a aconsejado que lo siguiera, asĆ­ que lo hice y sorprendĆ­ a tu Padre saliendo de la oficina con una mujer, no creĆ­a lo que veĆ­a asĆ­ que les seguĆ­ y los vi entrar a un motel”.


   “Entraste y los sorprendiste?”.

   “No, no iba a hacer un espectĆ”culo en ese lugar, nunca me ha gustado hacer pĆŗblicas las cosas privadas, asĆ­ que me regrese a casa…

   …desde ahĆ­ le comencĆ© a seguir, y para mi sorpresa lo pille con varias mujeres”.

   “Varias?”.

   “Si, fue mĆ”s de una semana fingiendo que todo estaba bien, y a la vez  me dedicaba a seguirle!, tenĆ­a que saber todo sobre su infidelidad, y me topĆ© con que el desgraciado salĆ­a con tres mujeres, algunas era solo citas a comer y otras eran llevadas repetidamente a moteles”.

   “Que hiciste?”.

   “Mientras disfrazaba mis sentimientos, odiaba a tu Padre como no tienes idea, cada vez que lo veĆ­a saliendo con otra querĆ­a estallar y gritarle de todo…pero querĆ­a conocer bien esta nueva cara de tu Padre”.

   “MamĆ” aguantaste mucho, yo desde el principio le volteaba la cara de una cachetada”.

   “Pero llegĆ³ el final!, pude decirle que lo habĆ­a pillado…por fin estallĆ©!”.

   “CĆ³mo fue MamĆ”?”.

   “EstallĆ© cuando vi el colmo del descaro de tu PapĆ”!, lo vi saliendo de un elegante restaurante con esa traidora de Mariana…cĆ³mo pudo meterse con Francisco!”.

   “Mariana…nuestra vecina?, la madre de Stella?”.

   “Esa misma… es una cualquiera!”.

   “Ya veo, por eso es que de pronto dejaste de ser amiga suya. Cuando era niƱa, Mariana nos visitaba mucho”.

   “Esa descarada se atreviĆ³ a acostarse con Francisco…Ese traidor!, ambos son unos traidores!!!!!!”.

   Saber que Mariana habĆ­a cometido tal acciĆ³n me enfadĆ³, la vi como MamĆ” la veĆ­a, como una traidora!, cĆ³mo pudo hacerle eso a su amiga.

   En ese momento, veĆ­a una mirada de odio en MamĆ”.

   “Calma MamĆ”, sĆ­gueme contando, cĆ³mo les reclamaste?”.

   “A esa maldita sĆ³lo le cortĆ© la palabra, pero eso si…le dije que no volviera a aparecer por aquĆ­, o no respondĆ­a de mi”.

   “Y con PapĆ”?”.

   “A ese canalla si le hice un escĆ”ndalo…ya te dije que no soy de las que me gusta hacer show en pĆŗblico, por eso le espere que llegara a casa…
…el maldito vino con su cara de inocente, pero le grite hasta que me quedĆ© ronca la voz, pero desafortunadamente Ć©l llegĆ³ con un amigo de la oficina, y me tuve que contener algo”.

   “Que incomodo momento para ese tipo”.

   “Le tirĆ© de todo a tu Padre, jarrones y platos, Ć©l cĆ³mo pudo los esquivo; Oh Dios!, como querĆ­a darle, en la cabeza y en los…
…Eh en fin,  el problema es que aunque el tipo se fue, los vecinos salieron…Y ahĆ­ todo se hizo pĆŗblico!”.

   “Mariana tambiĆ©n saliĆ³?”.

   “Esa traidora tuvo algo de decencia y no apareciĆ³ por aquĆ­…claro que no querĆ­a que la vieran como la quita maridos que es!”.

   “Y despuĆ©s que pasĆ³?”.

   “Luego nos divorciamos y ya”.

   “No MamĆ”, dame detalles”.

   “Todo fue largo, cosas de abogados, el dĆ­a del escĆ”ndalo, tu PapĆ” saliĆ³ con una maleta y se fue a dormir a otro lado, luego enviĆ³ a alguien por sus cosas”.

   “Y el dĆ­a de la pelea fue aquel que me enviaste con tĆ­a Carolina para que me quedara unos dĆ­as verdad?”.

   “Si, no podĆ­as presenciar eso”.

   “Fue duro dejar de ver a PapĆ” de un momento a otro”.

   “Ese hombre arruinĆ³ mi vida…me engaĆ±Ć³ sin escrĆŗpulos”.

   “PapĆ” fue muy injusto contigo…ser infiel es lo peor que te puede hacer, si mi novio me hace algo asĆ­ no le perdono nunca”.

   “No lo perdones Alicia, los hombres no se merecen la confianza de ninguna mujer; Ojala nunca hubiera conocido a tu Padre”.

   “Mama te pudo preguntar, cuando lo conociste…que te gustĆ³ en PapĆ”?, porque te casaste con Ć©l?”.

   “Me casĆ© con el porque me enamorĆ© de tu Padre…era muy atractivo y todo un caballero”.

   “El fĆ­sico siempre te gustĆ³?, fue muy importante para que te interesara?… mira que PapĆ” siempre ha sido de bastante mĆŗsculo”.

   “Lo admito hija, sus mĆŗsculos me enamoraron, me fascinaba ser vista con ese hombre”.

   “Y en la intimidad?, algo que decir de ese tema”.

   “NiƱaaaaaaaa!, que preguntas!”.

   “MamĆ”, soy curiosa…Es mi naturaleza”.

   “Pues sabes quĆ©?….te contare lo que estas esperando saber!; Francisco es un hombre que estĆ” bien formado”.

   “Te refieres a su virilidad?”.

   “Pues las cosas como son, para que lo entiendas… TĆŗ PapĆ” tiene el pene bastante grande!”.

   “Vayaaaa!, no esperaba escucharlo asĆ­”.

   “Ya estas satisfecha?”.

   “No!…sĆ³lo me dijiste algo que me sorprendiĆ³, y como era PapĆ” en la cama?”

   “Eso sĆ­ que no lo sabrĆ”s!, ya estĆ”s en el lĆ­mite niƱa, primero muerta que contar esas intimidades…y ya no te dirĆ© nada mas de ese tema, mejor pregunta otra cosa”.

   DejĆ© de presionar en ese tema y decidĆ­ contarle sobre la salida del dĆ­a anterior con mi Padre, y la terrible situaciĆ³n que padeciĆ³ durante el partido de futbol…UsarĆ­a ese tema para preguntar sobre el golpe bajo que mi Padre refiriĆ³ como el peor golpe recibido en su vida.

   “Mama te contarĆ© que en la salida de ayer con PapĆ”…el recibiĆ³ un golpe bajo”.

   “Te refieres a un golpe…en sus partes?”.

   “Si, fue en el partido, en una jugada le dieron una patada, ahĆ­ entre las piernas”.

   “Y le doliĆ³ mucho de seguro”.

   “Si en efecto”.

   La mirada de MamĆ” una vez mĆ”s se tornĆ³ oscura.

   “Me alegro mucho!”.

   “MamĆ” como te vas a alegrar”.

   “Ese hombre se merece todo lo malo que le pase”.

   “Bueno, voy al grano en esto, MamĆ” le preguntĆ© a PapĆ” sobre lo que le pasĆ³ y mencionĆ³ que antes le habĆ­an pegado en sus bolas…un golpe mucho peor”.

   La expresiĆ³n de MamĆ” anticipaba a donde iba mi conversaciĆ³n.

   “Te contĆ³ de eso?”.

   “No quiso hablar de ello, pero pude saber que tĆŗ fuiste quien le causo ese dolor…claro Ć©l lo negĆ³, pero fue cuando se divorciaron verdad?”.

   “Deja de querer saber sobre eso!”.

   “MamĆ” cuĆ©ntame porque le pegaste?... cĆ³mo fue, dime mami”.

   MamĆ” se levantĆ³ hecha una furia, pero guardĆ³ silencio, se alejaba, y cuando le quise insistir sĆ³lo dijo:

   “Ya deja de hacer preguntas, niƱita entrometida, y…y yo no le pegue a tu Padre!… es mentira si te lo dijo!”.

   No pude sacarle mĆ”s cosas a MamĆ” ese dĆ­a, pero es obvio que si fue ella quien lastimĆ³ la hombrĆ­a de PapĆ”…en su peor ocasiĆ³n.

AHORA YA ENTERADOS DE LO SUCEDIDO HACE 2 DƍAS, SƓLO RESTA CONTARLES LO QUE HOY SUPE POR PARTE DE MAMƁ, EN UNA SORPRESIVA E INCƓMODA CONVERSACIƓN.

HOY.

   Luego de regresar de casa de Mariana, pase una noche en medio de pensamientos, estaba decidida a saber todo sobre lo sucedido entre mis Padres, hace 8 aƱos… debĆ­a saber todo!.

   A la maƱana siguiente, esperĆ© el regreso de MamĆ” del supermercado, Apenas me vio en la sala con mirada de determinaciĆ³n, sabĆ­a lo que buscaba.

   “OlvĆ­dalo, no te contarĆ© nada mĆ”s, mejor vete al cine o a donde quieras!…ni te molestes en insistir!”.

   Pero yo tenĆ­a una vez mĆ”s un as bajo la manga para hacerla hablar.

   “Que decepciĆ³n Madre, y eso que Mariana me contĆ³ con detalles su relaciĆ³n con PapĆ” hace 8 aƱos”.

   El escuchar eso la alterĆ³ fuertemente.

   “Esa maldita zorra!, porque fuiste a preguntarle sobre esas cosas!”.

   “Calma, calma, calma!, ya es inĆŗtil quejarse…me contĆ³ de todo sobre mi PapĆ”, es mĆ”s, fue una conversaciĆ³n muy centrada en los detalles…sobre todo en los grandes detalles de la entrepierna de mi Padre”.

   “NiƱita curiosa, ya te dije que no debes saber cosas como esas, no sĆ© para que te piquĆ© la curiosidad…pero no te contarĆ©!, no me sacarĆ”s nada!”.

   “Vamos, cuĆ©ntame sobre el golpe bajo a mi PapĆ”…no seas mala con tu hija”.

   “DirĆ”s, con mi curiosa hija”.

   MamĆ” mantuvo silencio, se dirigiĆ³ a la cocina y guardĆ³ los vivieres, tenĆ­a confianza en que mencionar a  Mariana la harĆ­a romper el silencio y contar, despuĆ©s de todo, no podĆ­a permitir que su hija supiera mĆ”s por su vecina y enemiga, que por ella misma…
…CĆ³mo esperaba tras unos 10 minutos, MamĆ” estaba sentada junto a mĆ­ y esperaba que la interrogara.

   “Gracias MamĆ”, ahora al grano: le pegaste en los huevos a mi PapĆ”?”.

   “Si, si le peguĆ© a Francisco”.

   “Y fue esa noche en la que mi Padre vino a pedirte que lo perdonaras, su Ćŗltimo intento por reconciliarse contigo, verdad?”.

   “Si, fue esa noche, Mariana te contĆ³ que fue ese noche?, Francisco se lo dijo, verdad?... no me extraƱa”.

   “No, ella no sabĆ­a que tu golpeaste a PapĆ” esa noche, ella mencionĆ³ algo que pasĆ³ la noche siguiente, y por eso yo deduje que lo habĆ­as golpeado en esa ocasiĆ³n”.

   “Que pasĆ³ con ellos la noche siguiente?…dime que pasĆ³”.

   “Te contarĆ© y tĆŗ me debes contar todo sin omitir detalles MamĆ””.

   “De acuerdo”.

   “Pues ellos tuvieron intimidad esa siguiente noche, y al parecer PapĆ” estaba indispuesto…de seguro por el golpe que le diste ahĆ­ abajo!, y parece que por eso no pudo cumplirle bien a Mariana”.

   “Ajajaaa!, me alegra haberles daƱado la noche romĆ”ntica!”.

   “Ay MamĆ” cuanto odio, pero en fin, el punto es que deduje que ese incidente sucediĆ³ porque tu lastimaste la virilidad de PapĆ” la noche anterior”.

   “De acuerdo, si golpee las huevas de tu PapĆ”…y se lo merecĆ­a mucho”.

   “CĆ³mo fue?, y que hizo para que le pegaras esa noche y no antes?”.

   “Esa noche vino a pedirme nuevamente que dejara el proceso de divorcio, el abogado me dijo que tu Padre habĆ­a planteado una conciliaciĆ³n, o algo asĆ­, y que debĆ­a presentarme a un terapeuta de pareja con Ć©l”.

   “QuerĆ­a salvar el matrimonio”.

   “Si, pero eso a mĆ­ no me interesaba!, te imaginas…hablando de nuestra intimidad  frente a un loquero…jamĆ”s!...
… AdemĆ”s atrasĆ³ todo el proceso de divorcio con su alegato, ya no querĆ­a saber mĆ”s de Ć©l y ahora tardarĆ­a mĆ”s en sacarlo de mi vida!”.

   “Y eso te enfado verdad?”.

   “Si!, y me iba a desquitar de todas las que me debĆ­a!, Ya de antes tenĆ­a ganas de golpearlo, y precisamente ahĆ­ entre las piernas….en sus grandes….en ese bulto que tiene ahĆ­!”.

   “En sus bolas”.

   “AsĆ­ es, y tenĆ­a que ser ahĆ­, por lo orgulloso que siempre se muestra por tenerlas grandes…Hija debes saber que tu Padre tiene las huevas grandes”.

   “Si ya lo sĆ©”.

   “Te lo dijo Mariana verdad”.

   “Algo asĆ­”.

   “Seguro esa maldita zorra se dedicaba a tocarle ese par”.

   Quise preguntarle a MamĆ”: -TĆŗ se las acariciabas a PapĆ”?-, hubiera sido una pregunta interesante, pero serĆ­a ir demasiado lejos y hasta se podrĆ­a enfadar conmigo al preguntar tal cosa.

   “Si le tocaba las pelotas a PapĆ”, eso no lo sĆ©…mejor continĆŗa”.

   “Pues como te decĆ­a, cĆ³mo fuera le iba pegar en el orgullo, ademĆ”s querĆ­a causarle dolor, y ahĆ­ es donde mĆ”s le duele al hombre”.

   “AdemĆ”s los mĆŗsculos de PapĆ” no lo protegen si le pegan ahĆ­”.

   “AsĆ­ es hija, podrĆ” tener los mĆŗsculos que quiera, pero pegĆ”ndole ahĆ­ lo iba a hacer sufrir, y lo hice sufrir!”.

   “Y cĆ³mo fue tĆŗ ataque?. TocĆ³, le abriste y fauleaste a PapĆ”?”.

   “No, no iba a ser tan simple, querĆ­a que creyera que tenĆ­a esperanzas conmigo…hice toda una pantomima para despuĆ©s desilusionarlo, y de la forma mĆ”s dolorosa posible!”.

   “MamĆ” planeaste todo detenidamente!, no fue un ataque espontĆ”neo, sino uno premeditado entonces…fuiste maquiavĆ©lica”.

   “Si lo fui!,  no estarĆ­a contenta con solo pegarle, tenĆ­a que ser una venganza completa”.

   “CuĆ©ntame todo”.

   “Le recibĆ­ de la mejor manera, dejĆ© que expusiera sus motivos, y no sabes lo sorprendido que se puso cuando le dije que aceptaba parar el divorcio…
…No se hallaba de la felicidad, en ese momento fue cuando me le insinuĆ©”.

   “MamĆ”!, llegaste hasta hacerle creer que querĆ­as sexo con Ć©l?”.

   “Y mĆ”s allĆ”, le puse bien la trampa y tu PapĆ” cayĆ³ como buen hombre…
…El afĆ”n por sexo lo traicionĆ³ y gustoso querĆ­a yacer conmigo…
…Francisco enseguida se quitĆ³ los pantalones, apenas le vi los calzoncillos se le notaba mĆ”s grande el bulto…

…Apenas se bajĆ³ los calzoncillos ya estaba empalmado, pero no sabĆ­a lo que le esperaba!”.

   “Como le pegaste?...le diste con el pie o con la rodilla?”.

   “No, en ese instante aĆŗn no le hice nada!…QuerĆ­a que sufriera lo mĆ”s posible, asĆ­ que el desquite serĆ­a cuando mĆ”s gozara tu Padre”.

   “Aayyy, MamĆ”, que malvada fuiste”.

   “Ɖl se merecĆ­a todo eso, y mĆ”s por traicionarme”.

   “Pero MamĆ”, no me digas que realmente llegaste a tener sexo con Ć©l!,  Solo despuĆ©s de acostarte le diste en sus cosas?”.

   “AsĆ­ fue, pero tienes razĆ³n sĆ³lo en parte…
…verĆ”s mi amor, tenĆ­a que coger a tu Padre totalmente distraĆ­do, no querĆ­a que se llegara a cubrir si sospechaba algĆŗn ataque… y sĆ³lo hay un momento en el que un hombre estĆ” totalmente distraĆ­do, y es cuando tiene relaciones sexuales…
…AhĆ­ sĆ³lo piensan en empujar su pene dentro nuestro, solo en empujar y en nada mĆ”s!”.

   “Pero si te penetrĆ³ entonces”.

   “Si, me dejĆ© hacer el amor, y montado sobre mi lo gozĆ³ bastante!; Y mientras mĆ”s lo disfrutaba tu Padre, yo me sentĆ­a mejor al saber que despuĆ©s… mĆ”s lo iba a lamentar!…
…y mĆ”s humillado estarĆ­a al saber que todo fue un engaƱo!”.

   “Esperaste el momento justo para lastimarlo ahĆ­”.

   “AsĆ­ es, claro que de vez en cuando tocaba mi objetivo…no querĆ­a perderlo de vista”.

   “Lo atacaste justo antes de venirse, verdad?”.

   “Adivinaste!, es fĆ”cil saber cuĆ”ndo un hombre estĆ” por terminar, y cuando el miembro de tu Padre anuncio que su carga de leche ya venĆ­a para afuera….actuĆ©!”.

   En mi experiencia con mi novio sabĆ­a que a los chicos les palpita la punta de la verga cuando ya estĆ”n por correrse…PapĆ” estaba en ese instante.

   “Justo en ese momento especial…que terrible para Ć©l”.

   “Si, justo ahĆ­…para que no pudiera gozar hasta el final, Le daƱarĆ­a la jornada de todas las formas posibles…nada de reconciliaciĆ³n, nada de venirse…y eso si…mucho dolor!”.

   “Como lo heriste?”.

   “En ese preciso momento jamĆ”s se hubiera esperado que le tomaran de la hombrĆ­a, asĆ­ que le agarre duro las huevas!!, se las apretĆ© a tu Padre!!!”.

   “Ayy Padre mĆ­o!”.

   “Si vieras la cara que puso cuando lo apretĆ©, Jajaja!, TenĆ­a ojos de ternero degollado…
Casi quise decirle: Sorpresa cariƱo!, te los cogĆ­!, te cogĆ­ tus grandes orgullos!, Jajajaja, no sĆ© por quĆ© no se lo dije, hubiera sido de lujo!”.

   “Pobrecito de mi Padre, y que mĆ”s pasĆ³?”.

   “EntĆ©rate que tu Padre apenas se las cogĆ­, se saliĆ³ de dentro de mĆ­!;  Yo por mi lado  seguĆ­ apretĆ”ndoselos con rabia!, puse toda mi fuerza en la mano y apretĆ©!, tambiĆ©n se los jalĆ©!”.

   “QuerĆ­as hacerle daƱo…que mala!”.

   “Claro que querĆ­a hacerle daƱo, querĆ­a dejarlo sin hombrĆ­a!”.

   “Se los seguĆ­ apretando y retorciendo….tu PapĆ” gritĆ³ y gritĆ³, pero no se las soltĆ©!;  SeguĆ­a con su mirada de ternero, pidiendo piedad, pero no la tendrĆ­a!...
…Lo tenĆ­a de las huevas y no se las iba a soltar al canalla!, se las retorcĆ­a mĆ”s y mĆ”s”.

   “Ayyyy MamĆ”, de pensarlo se me revuelve el estĆ³mago”.

   “Pues mĆ”s te vale aguantar la comida en tu vientre, porque lo que siguiĆ³ no fue nada lindo para Francisco”.

   La mirada de MamĆ” recordaba lo que debiĆ³ sentir al tener la virilidad de mi Padre en sus manos hace 8 aƱos….una pura expresiĆ³n de venganza y odio.

   “Pues bien, se los retorcĆ­a, y no le tuve misericordia!, use la otra mano para castigarlo con ambas, podĆ­a sentir sus huevotes en mis manos, se le aplastaban!...
…y muy mal para tu PapĆ” que los tuviera bien grandes!, mĆ”s fĆ”cil me fue cogĆ©rselos, y mĆ”s fĆ”cil apretĆ”rselos!”.

   “QuĆ© horror!, y que hacia Ć©l?”.

   “Nada podĆ­a hacer, tu PapĆ” es muy fuerte, pero cuando al hombre lo cogen por las bolas, pierden la fuerza!...
… Hija mĆ­a, como que de las bolas le viene la fuerza al hombre”.

   “Entiendo…huevos igual a fuerza, no hay huevos, no hay fuerza”.

   “Exacto!, sigo…Tu papa ya no podĆ­a ni gritar, y fue cuando me empezĆ³ a suplicar”.

   “Que decĆ­a?”.

   “Pues que lo soltara… era patĆ©tico oĆ­rlo, decĆ­a cosas como.: -Aayy Helena suĆ©ltamelos, te lo ruego-… Jajaja, eso querĆ­a, que suplicara el maldito!!!!!!”.

   “Y cuando le soltaste?”.

   “Cuando ya me cansĆ© las manos; Claro que sin ganas de querer soltĆ”rselas, aĆŗn querĆ­a hacĆ©rselas papilla”.

   “Por fin descansĆ³”.

   “Pero ahĆ­ no acabĆ³ su sufrimiento, Jajajaja”.

   “Que le hiciste MamĆ”?...ya estaba bueno, casi lo matabas”.

   “Ɖl se merecĆ­a mĆ”s!”.

   “No MamĆ”, te pasaste”.

   “Pues no me arrepiento de todo lo que le hice”.

   “Entonces que le hiciste cuando lo soltaste?”.

   “Antes de soltĆ”rselos hice que tu Padre se levantara, ahora lo tenĆ­a frente a frente, agarrado de la hombrĆ­a!, y cuando liberĆ© sus pelotas, el casi se cayĆ³…pero se mantuvo en pie…apenas.
…de hecho tuve que agarrarle de las manos para ayudarlo a no caerse”.

    “QuedĆ³ muy mal entonces”.

   “Hija ya te dije… cuando a un hombre lo cogen por los huevos…pierden toda su fuerza…
… y sabes lo curioso?, Ese dato me lo dijo tu propio Padre, que irĆ³nico!”.

   “Te lo enseĆ±Ć³?”.

   “Si, el me lo enseĆ±Ć³, en una ocasiĆ³n cuando aĆŗn Ć©ramos novio y que me habĆ­an asaltado…me dijo que pegar en las bolas no solo servĆ­a para causarles dolor a los hombres, sino tambiĆ©n para dejarles sin fuerzas…
…Y volviendo a esa noche…aĆŗn no habĆ­a terminado con tu PapĆ”!”.

   “MamĆ”…no!, le pegaste otra vez?”.

   “Si!, lo agarraba de las manos para que no se cayera, pero asĆ­ tampoco se podĆ­a cubrir  las huevas! Jajajaja!”.

   “Auch para mi Padre”.

   “Y sin obstĆ”culos, le metĆ­ la rodilla en sus huevotes!…que sufriera mĆ”s tĆŗ Padre!”.

   “MamĆ”, que bĆ”rbara fuiste!”.

   “No le tuve piedad, le metĆ­ otro rodillazo, y otro, y otro!”.

   Ya me estaban dando nauseas reales.

   “Le di como cinco o seis, ya no recuerdo, pero tu PapĆ” ya ni se quejaba, de hecho se desmayĆ³; Yo era la que lo mantenĆ­a de pie a ese tĆ­tere Jajaja”.

   “Te pasaste MamĆ”!, y bastante!”.

   “Tal vez, pero no me importaba; En fin, lo fui dejando sobre la cama, y ahĆ­ se quedĆ³…dormidito”.

   “Y lo dejaste asĆ­?, no se te ocurriĆ³ que le pudiste hacer algĆŗn daƱo?...uno permanente!”.

   “La verdad no, tiempo despuĆ©s si pensĆ© mejor las cosas y debĆ­ preocuparme mĆ”s por Ć©l, pero en ese momento solo esperaba que despertara para que se fuera rapidito”.

   “MamĆ”, que ira tan descontrolada la tuya, no estĆ” bien eso”.

   “Pero Ć©l se lo merecĆ­a por serme infiel, ademĆ”s si hice algo para ayudarlo…lo vestĆ­, y cuando le puse los pantalones, le coloque hielo, ahĆ­ en su gran bulto”.

   “Era lo mĆ­nimo!”.

   “Cuando despertĆ³ tu PapĆ” ya tenĆ­a algo de alivio, el hielo le ayudĆ³ a que no se le hincharan tanto”.

   “Las debiĆ³ tener como toronjas MamĆ”…es que pegarle tanto, no sĆ© cĆ³mo mi Padre pudo tener hijos despuĆ©s”.

   “Vez!, no fue tan serio para Ć©l”.

   “Si pero eso no lo supiste hasta que los tuvo!...y como quedĆ³ todo?, que pasĆ³ cuando despertĆ³?...y por cierto, que dĆ­a despertĆ³?”.

   “Jajajaja, Pues despertĆ³ al dĆ­a siguiente”.

   “Al dĆ­a siguiente!!!!!!”.

   “CĆ”lmate!, sĆ³lo bromeo, el llegĆ³ a casa pasadas las 8 de la noche, como a las 9 ya lo habĆ­a dejado fuera de combate… y tu PapĆ” despertĆ³ pasada las 10…digamos 10:30”.

   “Una hora y media sin conocimiento!, y no te preocupaste?, esa no me la creo MamĆ”!”.

   “De acuerdo, mentĆ­, si me preocupe un poco viendo que no despertaba, pero tu Padre respiraba bien y eso me tranquilizĆ³; AdemĆ”s sabĆ­a que esos golpes aturden mucho al hombre…y como le apretĆ© y  pegue tantas veces…era lĆ³gico que tardara mucho en reaccionar. En fin, tardĆ³ pero despertĆ³”.

   “Y que pasĆ³ cuando despertĆ³…que dijo PapĆ”?”.

   “Pues lo primero fue quejarse, aun con el hielo que le habĆ­a puesto, le dolĆ­a mucho…eso para mĆ­ fue agradable”.

   “Malvada!”.

   “Apenas me vio de frente le dije que se fuera, que la prĆ³xima vez le irĆ­a peor”.

   “Se enfadĆ³ contigo, imagino”.

   “Pues no estaba enfadado, mĆ”s bien estaba asustado, me tuvo miedo”.

   “Y cĆ³mo no, despuĆ©s de la tortura que le hiciste… Pero no te recriminĆ³ de alguna forma?”.

   “Pues no le di tiempo para eso, le apresure, le recalcaba que se fuera ya; Ɖl como pudo se puso en pie y cojeando se fue a la puerta….
…sĆ³lo balbuceo en la entrada que yo estaba mal, sĆ³lo repitiĆ³ eso… que estaba mal”.

   “En otras palabras te dijo que estabas mal de la cabeza”.

   “Pues si vengarse de un cruel engaƱo, es estar mal de la cabeza, pues lo estoy entonces”.

   “Tal vez fue locura temporal…MamĆ” te dejaste llevar por la venganza…y de una forma cruel y despiadada; Es que aĆŗn no me imagino lo mucho que debiĆ³ sufrir PapĆ” cuando le retorciste las bolas”.

   “Lo que debiĆ³ sufrir?, pues todo lo que sufriĆ³ se lo mereciĆ³!, que creĆ­a tĆŗ Padre?, que iba a gozar con su pija y sus huevas impunemente con todas esas mujeres?, pues esa noche le llegĆ³ su hora, cayĆ³ completito en mi trampa…
… Lo hice gozar, y cuando mĆ”s lo hacĆ­a, le hice sentir el mayor dolor de un hombre!, esa noche sus enormes huevas no hicieron su labor…no soltaron todo lo que tienen adentro!…nunca mĆ”s lo soltarĆ­an dentro de mĆ­!...
…esa noche terminaron aporreadas e hinchadas!!, fue una mala noche para esas dos, y para Ć©l!!!!”.

   MamĆ” una vez mĆ”s se mostraba colĆ©rica, asĆ­ que hubo que calmarla.

   “Tranquila, tranquila MamĆ”!, Ć©l no estĆ” aquĆ­ para que te enfades asĆ­”.

   “Bueno ya, eso es todo lo que hay que contar… satisfecha?, niƱata curiosa!”.

   Dejamos la conversaciĆ³n hasta allĆ­; Si les agrego que PapĆ” no se apareciĆ³ por la casa en unos 3 meses. Obviamente el querer pasar tiempo con su hija, lo hizo arriesgarse a verse con mi Madre.

   Pero en esa Ć©poca, no vi odio de mi Padre hacia ella, tal vez considerĆ³ que toda la tortura que mi Madre le causĆ³ era bien merecida por engaƱarla tan frecuentemente con diversas mujeres, incluida su vecina y  mejor amiga Mariana.

   Lo que no me explico, es la reacciĆ³n de mi Padre hacia Mariana por lastimarle las pelotas…MamĆ” casi que se las destripa y no se enfadĆ³ con ella.

   Tal vez algĆŗn dĆ­a le pregunte a PapĆ” sobre ello, pero por ahora no…ya estĆ” bueno de curiosidades.

   Bien, ya he cumplido con mi narraciĆ³n, ahora saben Todo sobre mi Padre, siendo las fuentes: Ɖl mismo, mi Madre y nuestra vecina Mariana; Por Ćŗltimo les agrego que  cuando me iba a acostar, MamĆ” tocĆ³ a mi puerta…Simplemente no podĆ­a esperar hasta maƱana.

   Esperaba que le contase mĆ”s detalles de mi charla con Mariana, especialmente de como PapĆ” y la vecina pasaron la noche posterior a la tortura testicular.

   MamĆ” soltĆ³ muchas carcajadas de satisfacciĆ³n, al enterarse con mĆ”s detalle que habĆ­a arruinado la noche de sexo entre los amantes, al dejar a mi Padre disminuido sexualmente, con tremendo castigo a sus huevos!...
…AdemĆ”s Ć©l saber que la propia Mariana le lastimĆ³ sin querer las pelotas, causĆ³ mĆ”s felicidad en MamĆ”.

   Lo que si hice, fue omitir la parte de cĆ³mo tras Mariana lastimar las adoloridas bolas a mi Padre, Este terminĆ³ la relaciĆ³n con ella; No me pareciĆ³ justo contar eso, pues como ya dije, no conocĆ­a el motivo real de PapĆ” para dejar a Mariana…  AdemĆ”s no querĆ­a fomentar la enfermiza alegrĆ­a de MamĆ”


Fin.

Gracias
Comentarios a  zatniktiel@hotmail.com

   NOTA: Esperen un prĆ³ximo relato relacionado con esta saga, donde se darĆ”n explicaciones de algunas cosas, asĆ­ como nuevas charlas entre los personajes.

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