CONTIENE:
-BALLBUSTING MUJER/HOMBRE
Jorge Noguera manejaba el vehĆculo con un destino fijo, habĆan pasado dos semanas desde la firma del acta de divorcio con Karina. Eran de noche y se dirigĆa a una celebraciĆ³n, evento convocado por Maribel para conmemorar el cumpleaƱos de Karina.
En cuestiĆ³n de dĆas que Jorge descubriĆ³ la relaciĆ³n amorosa entre su ex esposa y la veterinaria y fue cuando ordenĆ³ limpiar la habitaciĆ³n y encontraron un viejo celular de la mujer, Jorge comenzĆ³ a usarlo y fue como descubriĆ³ antiguos mensajes entre las amantes.
AhĆ se relataban las maneras en que se veĆan a escondidas en la habitaciĆ³n de Maribel, las veces que se tocaban y lo dulce de los besos de la veterinaria. En aquel momento Jorge entrĆ³ en una cĆ³lera terrible. ReventĆ³ el viejo celular al estamparlo contra el suelo, rompiĆ³ muebles y quebrĆ³ algunas ventanas. Ahora ya entendĆa la frivolidad de su exmujer, la hubiera matado en ese momento.
El vehĆculo de Jorge se estacionĆ³ lejano a la residencia paterna de Karina, se dirigiĆ³ a la puerta y fue recibido por la tĆa de la muchacha. Fingiendo empatĆa Jorge alegĆ³ quererla felicitar a pesar de los Ćŗltimos chascos en los dĆas anteriores.
—Seguiremos siendo amigos despuĆ©s de todo —dijo antes de que lo dejaran pasar.
La reuniĆ³n se celebraba en el jardĆn de la casa donde estaban dispuestas algunas mesas, reconocidos invitados y buena mĆŗsica.
—¿QuĆ© haces aquĆ? —quiso saber Karina, estaba preocupada con la llegada del hombre.
—Karina, querida a pesar de ser tu exmarido siempre fui tu amigo.
—Un amigo que nadie quisiera tener —corroborĆ³ Maribel que estando cerca oyĆ³ las palabras del hombre.
—Se ven bellas estando asĆ juntas. ¿DĆ³nde fue que se conocieron?
—En la universidad, ¿por quĆ©?
—SĆ³lo deseaba saber, estimada Maribel. Ahora bien, estarĆ© por allĆ” tomando algunas cervezas. Bonita celebraciĆ³n que te preparĆ³ tu mejor amiga —el hombre se fue a reunir con unos conocidos.
—No te preocupes. Es un pesado que te quiere arruinar el momento. Vamos a celebrarte, mi amor.
Jorge se dedicĆ³ el primer tiempo a intercambiar palabras con un amigo mientras ingerĆa cerveza. EnfocĆ³ la mirada en una inmensa pantalla al centro del patio donde se proyectaban diferentes fotos a lo largo de la vida de Karina, Jorge sonriĆ³ para sus adentros. Luego de varios minutos caminĆ³ hasta el muchacho que se encargaba de proyectar las imĆ”genes.
—No puedo hacer eso —negĆ³ el joven cuando Jorge le ofreciĆ³ un disco.
—Aceptalo, soy el ex marido de Karina, jamĆ”s le harĆ© algo malo.
—Entienda que no debo... ¿quĆ© hay en ese disco?
—Son viejos recuerdos... ¿si te pago aceptarĆas?
El joven dudĆ³... Jorge le hizo ver aquellos dulces billetes de valor.
—EstĆ” bien, seƱor. Acepto. Pero no me meta en un grave problema
Le fue entregado el disco y los billetes, Jorge se dirigiĆ³ al centro del escenario, impaciente porque se mostraran las escenas. El disco contenĆa fotos de sexo entre Ć©l y la mujer, no detallaba en desnudos pero la siguiente escena mostraban a Karina y Maribel teniendo relaciones sexuales en su habitaciĆ³n de residencia, donde Jorge ordenĆ³ colocar cĆ”maras ocultas en un momento de invasiĆ³n a la privacidad.
Ahora la gente lo miraba con atenciĆ³n, muchos pensaban que le pedirĆa una segunda oportunidad a la mujer. Karina estaba expectante, Maribel retadora. Jorge micrĆ³fono en mano hablĆ³:
—¡AtenciĆ³n! Como muchos me conocerĆ”n soy Jorge Noguera, ex esposo de Karina. Y me es triste saber que ya no estoy con ella, porque sĆ© que me casĆ© muy enamorado de ella hasta ahora no sĆ© si ella de mi. ¿Saben por quĆ©? Porque ella prefiriĆ³ cambiar esto... —hizo una seƱal con las manos y se proyectĆ³ en la pantalla su video Ćntimo de 5 segundos—, por esto otro —enseguida la imagen cambiĆ³ para mostrar a Karina y Maribel echadas en una cama tocĆ”ndose.
Los invitados reaccionaron con sorpresa y unos pocos murmuraron en secreto, otros posaron sus miradas inquisidoras sobre Karina, como si la odiaran o le tuvieran asco. Ella empezĆ³ a llorar, su padre la cogiĆ³ del brazo y la llevĆ³ dentro de casa. El video tuvo que ser retirado. Maribel se acercĆ³ hasta Jorge y empezĆ³ a empujarlo hacia la salida.
—¿QUĆ PRETENDES? —gritaba.
El hombre reĆa con sorna mientras era conducido a la calle.
—¿POR QUĆ HACES ESTO? ¿POR QUĆ NOS JODES ASĆ? ¡NO GUARDAS RESPETO POR KARINA?
—Pero si las estoy ayudando a salir de su closet. No seas malagradecida.
—¡Eres un perro!
—La perra anormal eres tĆŗ. Que confundiste a Karina.
—¡No confundĆ a nadie! Karina es asĆ.
—Una asquerosa.
Maribel sintiĆ³ mĆ”s odio hacia Jorge. ¿Como una persona podĆa ser tan nociva? Lo odiaba definitivamente, y merecĆa tanto dolor por ser como era. Maribel cerrĆ³ el puƱo y lo enviĆ³ estrellĆ”ndose en la entrepierna llamativa de Jorge.
El robusto hombre emitiĆ³ un alto gemido gutural cuando sus dos grandes y colgantes bolas fueron golpeadas ante los nudillos de la lesbiana mujer. Ćl por instinto iba a doblarse para sostener los huevos con ambas manos pero ella fue mĆ”s rĆ”pida y con la punta del pie pateĆ³ profundamente en los dos grandes cojones, crujiendo el maltratado escoto y provocando un grito fuerte a Jorge.
El macho juntĆ³ las rodillas y se doblĆ³, gimiendo de dolor. AgarrĆ³ sus pelotas mientras que una erecciĆ³n se adueƱaba y marcaba en su pantalĆ³n ceƱido.
Maribel lo mirĆ³ con evidente disgusto. Dio un paso atrĆ”s y dirigiĆ³ su pierna entre los muslos de Jorge, aplastando sus manos y huevos en uno sĆ³lo golpe, arrancĆ”ndole un gemido fuerte.
El pene de Jorge estaba tan duro como una roca, se sacudiĆ³ violentamente y lĆquido preseminal brotĆ³ de su punta corriendo por su miembro palpitante.
Maribel volviĆ³ a patear aplastando las gĆ³nadas. Jorge soltĆ³ otro aullido ensordecedor sintiendo el dolor explotar desde sus testĆculos traumatizados. De su polla empezĆ³ a salir a borbotones su leche masculina. Jorge gimiĆ³ y se desplomĆ³ en el suelo, acurrucĆ”ndose en posiciĆ³n fetal.
—Te juro que para la prĆ³xima te irĆ” peor —decĆa Maribel—. ¡Me caes mal! Te vas a arrepentir de esta y unas otras.
La mujer se retirĆ³ para enfrentar una tormenta campal en la casa, Jorge hubiera deseado reĆr como una hiena pero sĆ³lo saliĆ³ una mueca de dolor, se quedĆ³ en el piso agarrĆ”ndose la entrepierna.
Hola....yo reviso el blog diariamente... desde que Pablo empezaba a salir con Antonio... cuando van a subir una buena historia de Alfredo y Pablo???
ResponderBorrarPrimeramente gracias por tu lealtad al blog.
BorrarSĆ, reconozco que hasta ahora han sido reducidas las historias entre ellos pero, con anterioridad se han publicado historias entre ambos. Por ahora estarĆ”n saliendo historias en series de personajes, donde las de Alfredo y Pablo estarĆ”n encartadas en Pablo en Guerreros de la Arena.
Ok gracias
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