Emboscada por "El Mono" - Las Bolas de Pablo

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22 feb 2017

Emboscada por "El Mono"

ORIGINAL DE: ZATN

Contiene Ballbusting Mujer/hombre

   Mi nombre es EstefanĆ­a, tomaba un refrescante baƱo nocturno cuando de pronto veo abrir la puerta del baƱo, me alarmo enseguida!, SĆ© que mi marido no estĆ” en casa, y la Ćŗnica persona que se encuentra conmigo en el hogar, no me es de fiar.

   Efectivamente era “El Mono”!, un amigo de mi esposo que se quedaba por unos dĆ­as con nosotros,  siempre lo conocĆ­ por ese apodo, la verdad no sabĆ­a su real nombre.

   Pues bien, este “Mono”, para nada me daba buena espina tenerle cerca,… en mĆ”s de una ocasiĆ³n le he sorprendido viendo mi trasero  y busto… es obvio que sentĆ­a alguna atracciĆ³n por mĆ­.

   He sido emboscada!, “El Mono” ingresa con los calzoncillos abajo y mostrando los genitales; Su expresiĆ³n facial… ojos de par en par, devorando mi cuerpo, y la boca abierta y babeante, son mĆ”s que suficientes para saber que quiere. AdemĆ”s el tono rojizo en sus mejillas….es un obvio signo de que estĆ” bebido!.

   Puedo ver su miembro viril totalmente empalmado, de seguro mĆ”s rĆ­gido que cĆ³mo nunca lo ha tenido; Debo admitir que la salchicha de “El Mono”, es claramente mĆ”s larga y gruesa que la de mi marido.

   Mi situaciĆ³n es desesperada, sin alguien mĆ”s en casa, no tiene sentido gritar!, y para que molestarme en cubrir mi desnudez?, Debo centrarme en que hacer!, en cĆ³mo salir del baƱo, y correr a una casa vecina en busca de ayuda.

   El miserable extiende los brazos casi abarcando la amplitud del estrecho baƱo, imposibilitando cualquier fuga hacia la puerta tras Ć©l; Con una estĆŗpida sonrisa, avanzaba lentamente hacĆ­a mi con su erecta verga… sabe bien lo que quiere obtener de mĆ­.

   Sin duda confiado en su superior fuerza fĆ­sica, da por hecho que me harĆ” el amor!… Que importa si me resisto, mi fuerza no es rival contra la suya!…Si cierro las piernas y digo NO, a Ć©l no le afectarĆ”…se impondrĆ” con sus mĆŗsculos, y lograrĆ” lo que quiere!.

   QuĆ© pensarĆ” ahora mismo en su primitiva mente masculina?...No es obvio?, Solo puede pensar, en atraparme con sus asquerosas manos, tirarme al piso de baldosa, y meter su larga verga hasta el fondo de mi vagina!...

   …GozarĆ” penetrarme!, y no me sacarĆ” su cosa hasta que los huevos le hayan quedado completamente vacĆ­os…

   …Y hablando de ellos…

   … Los tenĆ­a altos, muy pegados a su verga, y rodeados de muchos pelos, toda su zona genital estaba asĆ­… Era extraƱo ver esto, pues mi marido siempre mantenĆ­a sus partes bien afeitadas; Pero eso sĆ­, el montĆ³n de pelos, eran mĆ”s negros que el carbĆ³n…, no le decĆ­an “El Mono” por el color de los pelos.

   Pero volviendo al punto… y especialmente a ese punto… es decir sus huevos!, Mientras avanzaba hacia mĆ­,  los tenĆ­a totalmente desprotegidos.

   “El Mono” cometĆ­a el peor error que puede tener un varĆ³n ante una inminente lucha!…descuidar  la parte mĆ”s sensible de su anatomĆ­a!.

   La emboscada que me tendiĆ³, ¡tenĆ­a una gran falla! Fuera causada esta, por el alcohol en su cabeza, o sencillamente por su desmedida y enferma calentura, me daba igual!... Estaba atrapada en el baƱo con un depravado, y me aprovecharĆ­a de su descuido.

   …Era muy obvio lo que harĆ­a… apenas su entrepierna estuviera a mi alcance, le patearĆ­a tan fuerte las bolas, que pasarĆ­a mĆ”s de un mes antes de que “El Mono”, pudiera volver a cogerse a una mujer.

   Y las cosas sucedieron como esperaba….. les contarĆ© que todo terminĆ³ en 5 actos.

   Acto 1: “El Mono” llegĆ³ hasta un paso de mĆ­, ya a punto de abalanzarse y tomarme en sus garras.

   Acto 2: Le lancĆ© el patadĆ³n mĆ”s fuerte que he dado en toda mi vida.

   Acto 3: Mi pie golpeĆ³ sus pelotas con tanta fuerza, que las oĆ­ crujir!… Sonaron igual que castaƱas al fuego.

   Acto 4: Un desgarrador alarido emergiĆ³ de la boca de “El Mono”.
   Acto 5: “El Mono” se desplomĆ³ al piso en medio del dolor de sus pelotas.

   Esa noche “El Mono” me emboscĆ³ esperando hacerme el amor, pero todo le saliĆ³ mal!; SĆ³lo un golpe fue necesario para ponerlo en su sitio…

   …Y es que una patada bien dada en las bolas, siempre es efectiva para detener a un hombre.

   Todo habĆ­a terminado y mientras agonizaba del dolor en el suelo, pasĆ© sobre Ć©l y tranquilamente abandonĆ© el baƱo.

   Que sucederĆ” luego de este incidente?, pues adelanto que mi esposo se enterarĆ” de esto, y nada bueno vendrĆ” para el miserable de “El Mono”.

Fin.
Gracias.
Comentarios a  zatniktiel@hotmail.com

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