-SEXO HOMOSEXUAL
-BALLBUSTING HOMBRE/HOMBRE
El guapo Eddy se rascó la cabeza mientras miraba a Pablo.
—Así que de momento no tienes ningún tipo de problema con tu esposo —comentó—, simplemente están separados porque tiene visita en su departamento y es la de su hijo, que heavy tu situación. Deberías quedarte con un completo soltero como yo.
Dedicó una pícara sonrisa a Pablo quien lo visitaba nuevamente en su hogar. Eddy no tenía camisa por lo que a la luz estaba su musculoso pecho y sus abdominales.
—Soltero como tú —se rió Pablo.
Era obvio que estaba ahí por la tentación de Eddy pero todavía amaba a David. Y no quería confusiones pese a estar al punto de probarla.
Eddy era agradable y despreocupado, a Pablo le encantaría montar ese majestuoso semental o simplemente follar su grande y carnoso culo.
—¿Haremos ballbusting? —preguntó Eddy.
Pablo afirmó con la cabeza y no le dio tiempo de reaccionar cuando Eddy se reclinó bruscamente, haciendo crujir sus bolas en su cuerpo.
—Ja, ja, ja. ¿Te dolió, Pablo? Déjame ver —dijo Eddy. Bajó suavemente el pantalón de Pablo.
El inmenso bulto de Pablo hizo que a Eddy se le aguara la boca, que apetitoso bulto y que lástima que otro hombre lo aprovechase cuando quisiera.
Eddy abrió la boca tanto como pudo y chupó las dos bolas de Pablo en su boca.
Pablo cerró los ojos y Eddy gruñó, su boca se llenó al máximo con las enormes bolas de Pablo.
Pablo jadeó y examinó el rostro de Eddy luego detalló que sus piernas estaban separadas mientras se la mamaba. Echó el pie hacia atrás.
Pablo propinó una fuerte patada a las bolas de Eddy.
El muchacho dejó escapar un chillido sordo y su mandíbula se cerró.
Enseguida Pablo también gritó. Retorciendo su cuerpo en medio del dolor, sacudiendo su cadera hacia atrás y adelante mientras los dientes de Eddy molieron sus bolas.
Eddy se alejó de la entrepierna de Pablo.
—Ay, lo siento, Pablo. Pero tu golpe me agarró desprevenido y fue muy duro, dolió.
La polla gorda y carnosa de Chacón había cobrado vida, escupiendo un gran lote de crema en sus abdominales.
—Mis bolas —croó Pablo
Eddy se inclinó y recogió algo del semen de Pablo con su dedo. Lo probó y lo dejó correr por su garganta.
Pablo lo miró a los ojos.
Y Eddy le dedicó una gran sonrisa. Cerró el puño y clavó un golpe sólido en las bolas de Pablo.
La boca de Chacón se abrió en un grito silencioso y sus ojos se volvieron hacia su cabeza.
Eddy se rió mientras Pablo se frotaba las nueces gimiendo.
—Me gusta como te oyes —reconoció Eddy.
Pablo volvió a gemir.
—Y me gusta mucho más este pollón.
Eddy se metió en la boca el grueso pene de Pablo le dedicó una placentera felación que no se detuvo hasta que extrajo aquel néctar caliente y cremoso que probó en sus labios y también pasó por sus mejillas dejandolas manchadas.
Pablo se quedó complacido reposando, estuvo acariciando una mejilla de Eddy. Se contuvo de besar aquellos ricos labios.
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