ESCRITO POR: ZATN
CONTIENE BALLBUSTING VERBAL.
Me llamo Sabrina acabo de cumplir los 16 aƱos, y les contare cosas que he aprendido de MamĆ”, muy relacionados con la terminaciĆ³n del matrimonio de mis padres.
MamĆ” a pesar de su edad madura, es una mujer atractiva y seductora, llegando incluso a ser desvergonzada en mi humilde opiniĆ³n… no desaprovecha la oportunidad de usar escotes reveladores, o minifaldas… los tipos caen por montones ante mi Madre… De hecho con su fĆsico fue como engatusĆ³ a PapĆ”… el Ćŗnico problema es que MamĆ” despuĆ©s de casada siguiĆ³ usando su bello cuerpo con otros hombres, y a PapĆ” no le gustĆ³ eso.
Desafortunadamente para Ć©l, MamĆ” siempre ha sido quien lleva los pantalones en casa… y ademĆ”s se puede decir que tambiĆ©n es quien porta las pelotas en el hogar, porque PapĆ” no era muy dado a demostrar que tenĆa pelotas, y lo digo casi literalmente, pues cuando le reclamaba a MamĆ” por serle infiel… -Esas largas discusiones donde llamaba mujerzuela, zorra o puta a mi Madre-, Ella siempre terminaba pegĆ”ndole en las huevas a nuestro Padre…
…Fuera con patada, rodillazo e incluso hasta apretĆ”ndoselas… pero se vengaba por llamarla de esas formas que la disgustaban.
El final del pleito era siempre igual… un fuerte grito de PapĆ”, MamĆ” abandonando la habitaciĆ³n muy tranquila, en ropa interior, y dejando atrĆ”s a nuestro padre, o en el suelo en calzoncillos, o desnudo sobre la cama… pero siempre agarrĆ”ndose las joyas de la familia con mucho dolor!
Hasta que PapĆ” se cansĆ³ de la infidelidad de MamĆ”, y temiendo tambiĆ©n que un dĆa lo deshuevara, decidiĆ³ irse de la casa… Al poco tiempo se divorciaron, de eso ya hace un aƱo.
Pero una de esas noches, luego de un nuevo, repetido e inĆŗtil reclamo de nuestro Padre, busquĆ© a MamĆ” en la cocina (Tranquilamente comĆa helado en ropa interior luego de faulear a PapĆ”), Le preguntĆ© detalles de cĆ³mo vencĆa a mi progenitor.
Ya conocĆa sobre el tema de los golpes bajos… Porque apenas empezĆ³ a desarrollarse mi cuerpo, MamĆ” me habĆa explicado de la debilidad fĆsica que tienen todos los varones. Y me alentaba a ser segura de mi misma y que de necesitarlo, me defendiera sin dudarlo, atacĆ”ndolos en ese punto exacto.
Me dijo aquella vez: “PĆ©gale justo ahĆ a un hombre, y lo dejaras comiendo polvo!, CariƱo usa el pie, la rodilla o como sea, pero si le das… CrĆ©eme que de nada le servirĆ” que sea mĆ”s grande o mĆ”s fuerte que tĆŗ”.
Pues bien, esa noche en la cocina, me explicĆ³ todo de cĆ³mo le pegaba a PapĆ”… segĆŗn ella la clave era tomarlo por sorpresa, me asegurĆ³ que usar el fĆsico femenino siempre lograrĆa la distracciĆ³n del hombre…
…En las discusiones, PapĆ” estaba prevenido de no ser golpeado en los huevos, pero MamĆ” siempre lo distraĆa:
“…Le digo que quiero hacer las paces con Ć©l, y que me lleve a la cama… Al principio Ć©l no me cree, pero me quito el vestido, y cuando tu PapĆ” me ve en ropa interior, enseguida se baja los pantalones y se le hace la boca agua, ahĆ estĆ” distraĆdo... y sin problemas le pateo las bolas!”.
“AsĆ tan fĆ”cil es darles ahĆ, que no se preocupan mucho para que no le peguen en su parte privada?”.
“CariƱo, los hombres siempre se distraen con el cuerpo de la mujer, ahĆ es cuando una debe aprovechar y pegarle donde les duele”.
“No puedo creer que PapĆ” caiga tan fĆ”cil, vaya que es dĆ©bil de carne!”.
“Siempre lo ha sido!, desde que Ć©ramos novios, apenas me veĆa las pantaletas, enseguida se le paraba la verga… y si supieras como me rogaba para me acostara con Ć©l”.
“Y siempre le das asĆ?, siempre lo pateas?”.
“No, a veces es mĆ”s prevenido y se cubre, claro que es porque estoy muy enfadada, y abiertamente le digo que le voy a pegar entre las piernas…”.
“Eso no es problema, solo tengo que acercarme y besarlo, siempre se deja besar… para cuando termina el beso, tu PapĆ” ya estĆ” con la guardia baja… ahĆ solo tengo que levantar la rodilla, y cualquier golpe en los cojones lo deja en el piso”.
Le pedĆ contara mĆ”s cosas, y me narrĆ³ cĆ³mo en ocasiones jugaba con mi Padre. Me decĆa:
“A veces me burlo de Ć©l... me dejo llevar a la cama, siempre haciĆ©ndole creer que quiero que me lo haga… y entonces tu PapĆ”, ahora desnudo, vuelve a descuidar sus huevos… Cuando lo tengo encima y estĆ” casi por metĆ©rmela, se los aprieto…
…Siempre es igual!, tu Padre es muy bruto y no aprende de sus errores, ya van varias veces que cae en el mismo engaƱo… Definitivamente tu PapĆ” en ese instante solo puede pensar en culiarme…CĆ³mo me es de fĆ”cil agarrĆ”rselos, y una vez agarrado, vaya que lo hago gritar!”.
PapĆ” siempre cayĆ³ en la trampa de MamĆ”… Dejarse llevar por la seducciĆ³n era su talĆ³n de Aquiles.
Fue una noche en la que me integrĆ© con mi Madre, charlando sobre chicos y demĆ”s…Y lo aprendido de MamĆ” me serĆ” siempre Ćŗtil en mi vida de noviazgos y futuro matrimonio.
Fin.
Gracias.
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