Pedro Alfeñique en el club figth. Parte 2 - Las Bolas de Pablo

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11 dic 2018

Pedro Alfeñique en el club figth. Parte 2

ESCRITO POR: ZATN
CONTIENE BALLBUSTING M/M, F/M Y SEXO HETEROSEXUAL.

   En la primera parte Pedro Coronado conoció a Keilor Panamá, el exnovio de Claudia, de inmediato se dio una disputa verbal que no terminó en física debido a la intervención de un directivo del club Fight Two, el sujeto lejos de evitar el pleito buscaba sacarle beneficio comercial, dejando el enfrentamiento para un evento estelar en los próximos días, Claudia se enoja con su novio por comportarse de una manera tan inmadura y no desistir en enfrentarse a su exnovio Panamá.
         

   Gustavo Piñeres de 40 años es el directivo que cuadró la pelea entre los dos adversarios, el ambicioso sujeto guardaba los contratos recién firmados por ambos sujetos; Para mañana estaba pactada la pelea, sería la estelar, en donde el morbo por enfrentar a dos individuos de pesos diferentes y luchando por una mujer, sumado a una amplia publicidad, lograron un considerable aumento en las ventas... la gente quería ver sangre, un pleito real, entre dos hombres decididos a acabar al otro por quedarse con la chica.

   En la oficina de Piñeres por poco se da un encontronazo entre Pedro y Keilor, pero prevenido de lo que podía suceder y dañar el encuentro pactado, Piñeres trajo a un par de miembros de seguridad, quienes de inmediato detuvieron a los rivales y se aseguraron que cada quien se marchase sin volver a encontrarse con el otro.

   "JAjajaja", Reía Piñeres ante el seguro éxito del encuentro; Su risa incomodaba a una de sus asistentes, Camila Cifuentes, de 22 años, la mujer era bastante noble de carácter y se le notaba un fuerte rubor en sus mejillas.

   "Estás colorada, no me digas que estas enferma?". Piñeres no se interesaba en la salud de la joven, simplemente quería todo su personal sano para el evento de mañana por la noche.

   "Estoy bien Doctor Piñeres". La chica tenía en secreto, una relación con Keilor Panamá, y el verlo hace unos minutos la hizo colorearse, más aun cuando el luchador le hizo un guiño, lo que significaba que quería verla esta noche en un sitio privado... Camila ansiaba volver a yacer en la cama con el viril Keilor, quien últimamente había estado algo alejado.

   Durante los últimos días, Claudia seguía enojada con Pedro, la pelea con Panamá la molestaba mucho, además la publicidad colocándola a ella como el premio para el ganador la insultaba, pero no podía culpar totalmente a Pedro, él ya se había disculpado mil veces al no considerarla un trofeo... Y todo era idea de ese tonto de Piñeres, le conocía, un prepotente y engreído hombre que buscaba todo el día mujeres que llevar a la cama, a pesar de estar casado y con hijos... alguna vez le sedujo, acariciándole los huevos y mostrándole el escote en todo su esplendor, fue una artimaña necesaria para lograr el contrato de surtir con Protectores genitales a los luchadores y luchadoras del Club, ella no desaprovecharía una oportunidad para hacer negocios, y solo atontando al engreído con una futura promesa de sexo, le saco la ayuda para el contrato... Ahora no le estrujaba los huevos por aquella publicidad, solo porque esperaba seguir teniéndole de amigo y lograr nuevas ventas de artículos deportivos al club de lucha erótica.

   La noche previa al combate, Claudia llegaba a casa de Pedro, el varón trataba de hacer las paces con su actual pareja. Al sentarse la mujer en el borde de la cama, Pedro se colocó de pie a su lado.

   "Perdóname ya Claudita, mira que mañana es la pelea, y no quiero que estemos distanciado, es más te quiero ahí a mi lado".

   "NO iré!".

   Claudia intentó por las buenas una solución al asunto, abrió un botón del escote para convencer a Pedro del modo en que solo ella sabía.

   "Cancela la pelea Pedro, por mí...". Los ojos de Pedro casi se desorbitaron ante los melones de su pareja; El pene del macho dio un brinco, notándose el inicio de una erección. Claudia insistió en una respuesta, y al tercer llamado fue que Pedro habló:

   "Eso no pasará, lo siento mi amor, además ya no se puede querida, el contrato está firmado".

   "Los dos son unos niños, ya estoy cansada de estos juegos!". Claudia palmoteó las manos intrusas de Pedro a su escote, si no cambiaba en su decisión, no le dejaría jugar con sus pechos, la represión de la mujer dejó a Pedro con las ganas, pero no había más que hacer.

   "Moléstate si quieres Claudita, pero partiré la boca de tu ex noviecito, es un pedante e insoportable".

   "Al igual que tú!".

   La mujer estaba enojada ante la actitud inflexible de su pareja y decidió actuar.

   "Nada me hará cambiar de opinión, así que...". Pedro quedó mudo cuando la mano femenina le agarró los huevos.

   "AAHGGGG". Exclamó ahogadamente el macho.

   La mano de Claudia apretó con fuerza el escroto de Pedro. "AAAYYY, DEJAME CLAUDITA!!!!!!".

   "A ver si sigues con ganas de pelearte.... te gusta?". La mano de la mujer se ensañó con las gónadas del enano, retorciendo el saco escrotal

   Pedro arrugaba el rostro, y la mujer apretaba los dientes aplicando más fuerza: "A ver si un buen estrujón de huevas te hace cambiar de forma de pensar... porque tú piensas es con las pelotas!!!", reforzó aún más el apretón haciendo babear a Pedro.

   Por fin le liberó, desplomándose de inmediato Pedro al piso.

   El hombre se acurrucó en posición fetal, ante la vista de una mujer junto a él, algo desahogada al causarle dolor.

   "Y vuelve a hacerme enojar y te ira peor Pedro!".

   Coronado en su agonía veía las largas piernas de la madura mujer, en un acto impulsivo le beso la punta del zapato. Claudia quedó estupefacta y frunció el ceño

   "Quieres más Pedro?, me vas a conocer!".

   "Ayyy, perdón perdón mi amor". Pedro se agarró con más ahínco las bolas, protegiéndolas al máximo, Mientras temeroso de su suerte cerraba los ojos... cuando los abrió Claudia abandonaba el cuarto, sin duda era un mal momento para ser su pareja... esperaba que Claudia olvidase el persistente enojo y volviera a ser aquella amante maravillosa y que le consentía... sus huevos ahora eran un mundo de dolor, pero se notaba el leve drenaje de pre semen que le manchó el calzoncillo, como deseaba a la madura Claudia!

   Por otro lado, Keilor Panamá recibía la visita de Camila Cifuentes aquella misma noche...

   "Bebé te extrañaba".

   "Oh Keilor, hacía tiempo no te dejabas ver".

   "Ha sido un buen rato, pero aprovechemos ahora".

   La joven quiso pronunciar algo más, pero un beso de Panamá la calló, el hombre quería compañía femenina y saciaría su apetito nocturno con esta amante, Para Panamá Camila era solo una aventura pasajera, ya hasta había decidido dejarla, pero al verla el día de hoy, se dio cuenta que nunca estaba de mas una mujer que se derretía por ti.

   Panamá la llevó a la cama, oliendo el rico aroma a perfume de la mujer, casi con salvajía le arrancó las pantaletas a Camila, quien gozaba ante lo salvaje del macho.

   No tardó en cubrirla y entrar con su rígido falo, la penetración era rítmica y empapaba todo el interior de la chica quien jadeaba sin cesar. El ímpetu de Keilor se tradujo en una abundante eyaculación dentro de la muchacha, quien quedó pletórica.

   Tras una prudente pausa, Panamá descansaba acostado, recibiendo lengüetazos de Camila en su pene, que retomaba fuerza; Ya a plenitud la mujer se sentó sobre ese potro indomable y se empaló a gusto... Panamá la hizo salir solo para eyacular en su rostro, y que esta le lamiese todo el esperma...
...Para el tercer polvo, Panamá le dio por detrás, el perro a la perrita, la cama daba extraños ruidos, pero de alguna forma soportaba los embates de la pareja, la mujer no podía más y terminó de cara sobre la almohada, mientras el macho bajaba el ritmo, buscando reposar algo y a la vez gozar más detalladamente del asunto... el sudor empapaba a ambos, quienes ya tenían las sabanas todas húmedas... El pene de Panamá avisó y el hombre extrajo su miembro, para correrse sobre la espalda de la chica; Agotados, la pareja quedó en la cama viéndose a los ojos.

   Tras reposar, Keilor vio a Camila salir del baño ya vestida luego de asearse, Eran las 3 am, pero eso no importaba, el pene del macho nuevamente estaba listo para dar guerra:

   "Lo hacemos de nuevo?, no está mal una cuarta en la noche".

   "De acuerdo, pero respóndeme algo...". Camila desde el principio había tenido la duda de preguntarle aquello, pero solo de ver a Keilor su pasión reprimida la hizo centrarse en satisfacer su intimidad.

   "...ES cierto eso de que pelearse con ese hombre bajito por una mujer, el doctor Piñeres dijo que era cierto, pero yo no le creo, él es muy mentiroso sobre todo para obtener dinero".

   Keilor pensó un instante su respuesta, pero por lo machista que es respondió con sinceridad:

   "Mira cariño, yo tuve algo con Claudia, y no dejare que siga saliendo con papá pitufo, así que planeo volver con ella una vez que acabe con el pigmeo".

   La respuesta de Keilor devastaba a Camila...

   "Además Claudia tiene unas buenas <lolas>, y siempre me han gustado".

   "Eres un canalla!". Camila se enfureció, decepcionada por su amante.

   Panamá se levantó y abrazó a Camila.

   "No te pongas así, Camilita, yo soy un buen macho, y no niegues que te gusta que sea así".

   "Déjame!!".Camila intentó alejarle, pero el amante la apretó más fuerte y comenzó a besarle el cuello.

   "Vamos querida no te enojes, y vamos a gozar otra vez", los besos en los hombros y mejilla, parecían calmar a la mujer.

   "Además, siempre te ha gustado que te haga gritar un buen macho". Keilor sonreía y besaba las orejas de su amante, pero esta mantenía la mirada baja y de repente respondió físicamente... La mujer elevó su rodilla hundiéndola con fuerza contra los desnudos testículos de Keilor Panamá!

   El macho se alejó de inmediato de la mujer, mientras se quejaba:

    "AAAAUUHHHHH!!!"

   "Y a ti te gusta que te hagan gritar... Perro!".

   "Maldi...". Panamá no pudo insultarla del dolor en los huevos, de inmediato sobó sus grandes bolas.

   Camila abandonó el lugar azotando la puerta, Panamá alcanzó a gritarle "Vete entonces!, a ver si encuentras a otro que te la meta sabroso!".

   La joven tras oírlo se alejó corriendo del sitio, no podía dejar de llorar, como se pudo meter con semejante patán.

   Keilor se sentó en la cama, sobando sus huevos:" La maldita me los dejó aplanados!... y tengo pelea esta noche, zorra!".

   Amanecía el día de la pelea, Pedro se levantó pesadamente de su cama, sentía incomodidad en sus calzoncillos, vaya que le habían dolido los huevos anoche, Claudia era un problema, pero no se echaría atrás, esta noche acabaría con Keilor Panamá; Luego de orinar regresó a su habitación, allí estaba Claudia sobre la cama, había usado la llave que Pedro le había dado de la casa.

   "Que quieres ahora Claudia?, ya tome mi decisión, sé que no la compartes, pero respeta mi deseo".

   La mirada de Claudia lo decía todo, la mujer estaba arrepentida de su rabieta, una expresión que Pedro ya reconocía, y como lo esperó el varón la pareja expresó: 

   "Perdón Pedrito, es que me salí de mis cabales, tu idea me hizo enojar mucho".

   "Entiende Claudia, me apretaste las bolas, eso siempre dolerá un montón".

   "Perdón Pedro". La mujer invito al amante a sentarse junto a ella en la cama.

   "Pero siempre en las bolas!". Un nuevo ademán con la mano y Pedro se sentaba adyacente a Claudia... La mujer posó su mano en los calzoncillos de Pedro, masajeando el bulto testicular... "Es donde le daré a todo macho si estoy molesta, donde más les duele!, esa es la idea, que le duela y se arrepienta de hacerme enojar".

   El masaje testicular de Claudia iba acompañado de un primer plano a su pronunciado escote.

   Pedro jadeaba levemente ante los estímulos: "Solo te pido que me trates bien, y las palabras antes que los golpes bajos".

   "Haré lo que pueda". Claudia ceso el estímulo y se incorporó, Pedro la siguió con la mirada, cuando la mujer se detuvo recostándose contra un mueble, Pedro fue hacía ella. La mujer lo vio venir atónita...
...Pedro se acercó y metió la cabeza bajo la falda, hundiendo su nariz en la entrepierna de la mujer, Claudia sabía que eso solo significaba una cosa en su ardiente pareja.

   "Pero que haces Pedro?, no debe pasar eso, debes ahorrar todas tus energías para la noche".

   "Sólo una vez...". Casi rogó el pequeño sujeto.

   "Para ti nunca es solo una vez, mejor no... No seas irresponsable con tu cuerpo".

   "Vamos, hagámoslo, además he hecho cosas aún más irresponsables, ya me conoces".

   "Que pícaro eres!".

   "Además si quieres que ahorre energías, tu deberías colocarte arriba estas 3 veces".

   "3 veces?, es que el señorito pretende metérmela 3 veces?".

   "Es poquito para otras veces".

   "No tienes remedio, vas a darlo todo cogiéndome verdad... no tiene caso persuadirte Pedrito".

   "Entonces no hay más que hablar". Pedro hundía su lengua en la entrepierna de Claudia humedeciéndole el área de las pantaletas a punta de saliva.

   Se desnudaron y revolotearon en la cama, desfogando su pasión, Pedro lamia desesperadamente los enormes pechos de Claudia quien disfrutaba las caricias del hombrecito.

   Iniciaron el acto sexual, sin ahorrar fuerzas...
...Claudia hizo su parte, cabalgando el garrote de Pedro, pero este en más de una ocasión la montó, esforzándose bastante, simplemente para el hombrecito era inevitable gozar plenamente de su pareja.

   Tras un esfuerzo delicioso, el pene de Pedro vomitaba espeso esperma, el olor era penetrante y mezclado con los fluidos de Claudia se derramaron por todas las sabanas.

   Y como Pedro anheló, Claudia no dio señas de detenerse hasta que el macho expulsó el tercer chorro de esperma, terminando este último en la boca de la madura fémina, quien limpió hasta el último centímetro la gorda verga de su amado. La Pareja se besó gozosa de estar en buenos términos ahora.


   Por su parte Keilor Panamá se duchaba, enjabonaba sus pelotas, masajeándolas, aun le dolían, pero lo mejor era dejar atrás el incidente de anoche y centrarse en la pelea.

   El hombre seguía consintiendo su dolida hombría, pensaba:

   -Bendito que puedo usar protector en los huevos, porque el golpe de esa condenada me podría dejar en desventaja... la zorrita me los dejó sensibles!.

    Pasaron las horas y se abrieron las puertas del club Fight Two...
...Adriana llegó sola al club esa noche, presenciaría el evento de su hermano, aunque para nada estaba de acuerdo con los motivos, y menos por ser esa cualquiera de Claudia el origen de la disputa. A la entrada observó el cartel de los combates.

   Mientras tanto en el camerino, la salida temporal del entrenador de Pedro, da lugar a una escena entre los novios.

   "Deja de ver mis tetas o despertara tu amigote". Pedro no pudo dejar de sonreír, más cuando arrodillada, Claudia le besa el pene...

   "Y tu deja de besármelo o me volverás loco".
   Claudia besa al pequeño en los labios y le  ayuda a vestir, Pedro parecía un gladiador siendo vestido, pues permanecía en pie mientras la mujer le colocaba sus prendas; Claudia le ayuda a acomodar el suspensorio... Lentamente la ajustada prenda asciende por sus piernas hasta  acomodarse en sus dotados genitales... seguidamente le ubica la coquera de plástico que usan los combatientes...
...Con dedicación Claudia ubica la vital y rígida pieza en la entrepierna del macho, acomodando los testículos perfectamente.

   "Los muchachos están bien?, no quedan ajustados en la prenda?"

   "Están bien...aun te falta acomodar algo más".

   "Claro, tu bella verga". Claudia metió la mano en la coquera, tocando el falo flácido pero largo de Pedro, ubicándolo suavemente un poco hacía la izquierda.

   "Cómodo?".

   "Mucho, gracias".

   La cara de Claudia se tornó sería un instante:

   "Pedro, protégete bien las bolas".

   "Para eso está el protector".

   "No es una cosa tan rígida como esas coqueras de hierro, esas de plástico son flexibles y dejan pasar algo del golpe, protégete".

   "No seas paranoica, aun así protegen lo suficiente, es un equipamiento confiable... Tu misma se los vendes al Club".

   "Y por eso sé que son más flexibles, el club no quiere un protección total en los varones, no desean que tengan un tanque blindado entre las piernas, quieren que los golpes bajos por lo menos les incomoden algo".

   "NO hay de qué preocuparse, además, tu sabes que yo soy resistente".

   "Sí, es cierto que te recuperas rápido de los golpes bajos, pero igual gritas cuando te pegan... solo ten cuidado Pedro". Pedro estaba listo para la pelea.

   Adriana observaba el ambiente del lugar, El club Fight Two estaba más que lleno, era todo un evento el que se había planeado para esta noche, le hubiera gustado asistir con su novio Francisco, pero Pedro no lo soportaba y era mejor no causarle enojos la noche de hoy.

   Una última mirada a los combatientes en el ring... Dorlan Roa y Didier Morales, luchaban intensamente, parecía que Morales estaba por vencer, la gente consumía botanas y bebidas al por mayor en medio de la emocionante descarga de adrenalina de los agotados y sudados combatientes.

   En el camerino y justo antes de salir, Adriana saluda a su hermano, un beso en la frente para la buena suerte y Pedro esta con el ánimo en alto; Mientras camina al ring, las mujeres tras él se lanzan miradas de odio. Adriana se desvía en busca de su asiento, ahora solo resta esperar lo mejor para su hermanito.

   Los peleadores con sus entrenadores subieron al ring, el público estalló en júbilo, y Piñeres, más que interesado en satisfacer su ego, le quitó el micrófono al anunciador, presentando el mismo a los contendientes...
...Claudia permaneció en la esquina de Pedro, animándole, Keilor Panamá aprovechó para lanzarle una sonrisa y un beso a distancia, ante lo cual, la mujer desvió la mirada.

   Los ánimos estaban caldeados, y el entrenador daba los últimos masajes a Pedro, mientras Keilor comenzaba a danzar por el ring soltando sus músculos, cada quien fue al centro del ring, donde el árbitro planteó las reglas del combate.

   "Ya saben, nada de golpes ilegales, nada de golpes a la nuca con el puño cerrado, ni en la garganta, y el que tengan protector no es carta abierta para atacarse las bolas". El Juez estaba centrado en tener una pelea justa y sin problemas… El juez dio la señal, y la pelea inició!

   Rápidamente Pedro se abalanzó contra su rival, quien le esperaba con una patada buscando sacarle del ring, con lo que sería un "gol de campo", pero el pequeño hombre esquivó la patada, clavando su puño en la cara interna del muslo de Panamá, el puertorriqueño sintió el impacto en sus músculos inguinales, quejándose.

   "Maldito enano!". Panamá contestó con un puño pero Pedro retrocedió, más no esperó un nuevo ataque de Panamá, quien finalmente le alcanzó, le agarró de un brazo y lo arrojó hacia el otro lado del ring, Pedro se estrelló contra la lona pesadamente, y por fortuna se incorporó pues su rival corrió hacia él para patearlo en el suelo.

   Ambos participantes daban lo mejor de sí, y el combate se hizo cada vez más intenso...
...Panamá tenía ventaja en fuerza y peso, y logró conectar una patada en la espalda de Pedro, quien cayó de cara lastimándose la nariz, Panamá le iba a pisar.

   "Te aplastaré como a una cucaracha!".

   Pero Pedro se volteó y con un rápido movimiento  ascendente de pierna, clavó la suela en el bulto genital de Keilor.

   "Auuu!", un leve quejido y el Puertorriqueño retrocedió. Pedro estaba a salvo por ahora.

   Panamá al igual que Pedro usaba protector testicular, pero estos plásticos dejaban pasar algo del trauma y aun sensible por el maltrato nocturno de Camila, le provocó un dolor que por instinto le hizo estar prevenido.

   "Pigmeo, ya te agarraré y será tu fin!".

   El público animaba sin pausa, se notaba que la mayoría estaba con Pedro, claramente por ser de un peso menor y verse como el hombre al que le quieren quitar la mujer... El combate seguía:

   Pedro resbaló y perdió el equilibrio, Keilor aprovecho para darle un rodillazo en la cara... atontado, el hombrecito no pudo reaccionar ante un hombre que se inclinaba y conectaba un certero puño en el pecho del enano, haciéndole caer de espalda.

   Pedro estaba mareado y Panamá consiente pudo atacar a gusto, casi para deguste del público, conectó un patadón en la entrepierna de Coronado.

   "Uughhh", alcanzó a quejarse el pequeño... el área tenía protector, pero el impacto fue tan fuerte que parte del golpe lo sintieron los cojones de Pedro, los cuales seguían algo sensibles por el trauma de parte de Claudia.

   Los varones del público se quejaron, sabían que llevaba protector, pero era seguro que algo le había dolido; Pedro se agarró la entrepierna y rodó, evitando un nuevo puntapié.

   "Tramposo!, no se vale en las bolas!". Claudia reclamó.

   "No te quejes mi vida, que tenemos protección". Keilor le lanzó un nuevo beso a su examante.

   El combate continúa con resultado incierto, Pedro llevaba las de perder, pero daba pelea a Panamá, el hombrecito tuvo un momento de ventaja, logrando golpear en el tobillo a Keilor quien perdió el balance y terminó contra las cuerdas, boca abajo, la dura cuerda superior le semi-asfixió...
…Intentaba levantarse cuando sintió un fuerte golpe en la entrepierna... Por detrás Pedro le había descargado un severo puño justo a las bolas, así como con su rival, el protector le resguardaba bastante pero algo de impacto se manifestó en sus cojones.

   "AAyyyyy!". Alcanzó a quejarse Panamá antes de morderse los labios... Sus cojones también sintieron el nuevo impacto. Panamá retrocedió y Pedro se jacto:

   "Que pasa?, no puedes con alguien de menos peso, eres un fanfarrón".

   "Di lo que quieras, pero mi gran verga estará esta noche en el coño de Claudia, y la tuya te la tendrás de jalar en el baño".

   Claudia se mordió los labios, pero no dijo nada.

   Mientras las tensiones subían en el ring, Gustavo Piñeres dejó la arena y se dirigió al área administrativa, saluda al guarda de la puerta e ingresa a la oficina de tesorería, allí se encuentra Camila Cifuentes, la chica es la única que a esa hora trabaja, el encargado de cuantificar las ganancias de la noche ya se ha marchado, dejando todo bien registrado, es función de Camila digitalizar todos los datos.

   Camila se secaba las lágrimas que bajaban por su mejilla, aun recordaba el pleito de anoche con Keilor Panamá, y hubiera preferido no asistir hoy al Club, pues sabía que su exnovio combatiría hoy, no quería verlo nunca más, y si fuera por ella no hubiera venido al trabajo, pero su horario de labores le forzaron a venir, por lo menos no era deber de ella salir de esa oficina y esperaba ni por accidente tropezarse con Panamá.

   Deseaba con esmero que Keilor perdiera el combate, como se atrevía a despreciarla y luchar para quitarle la mujer a otro hombre, ojala ganase ese luchador Pedro Coronado. La llegada del directivo la hizo sobresaltarse y retomar su actividad.

   "Señorita Cifuentes, dígame el número mágico". Piñeres no se percató de la turbación en su empleada.

   "Doctor Piñeres me asustó... el número mágico es 180". Como siempre el término Doctor solo era un formalismo.

   Una gran sonrisa apareció en el rostro del empresario, 180, era el porcentaje de ganancias de las entradas, normalmente las ganancias del club eran cuantificadas en porcentaje, el 100% era lo cotidiano en ingresos, el número de hoy significaba un 80% superior a una noche promedio, y todo esto no incluía dividendos por videos y demás marketing, su evento de esta noche fue un éxito completo!.

   "Señorita Cifuentes puede irse a su casa".

   "Prefiero quedarme señor y terminar de digitalizar todo". Tal vez sería lo mejor alejarse de Keilor, pero su trabajo era siempre impecable y no quería dejarle incompleto.

   "Ande, tómese el resto del turno, vaya y fornique con su esposo o con su novio, porque es usted una mujer muy joven para estar casada, Ande, ande!"

   Camila comenzó a llorar, el recordar que ya no tenía novio le hizo colapsar.

   "Pero que le ocurre?".

   "No nada Doctor Piñeres, no se preocupe". La mujer secaba sus lágrimas con un pañuelo.

   Gustavo, se extrañó ante la reacción de la empleada, y decidió salir sin decir más... Justo antes de abrir la puerta observó nuevamente a Camila, se le vino a la mente que el llanto de esta se debió a algún problema amoroso... eso quería decir que estaba sola ahora, el frio individuo enseguida se saboreó los labios, analizó el cuerpo de la joven, y pensó:

-Vaya, vaya así que está solita, tal vez luego deba venir a consolarla, después de todo no está nada mal la muchachita.

   Mientras tanto en el ring...

   "AAuuugg". Se quejaba Panamá ante un puntapié en la ingle dado por Pedro, quien también sobaba su entrepierna.

   "Miserable, pigmeo, da gracias que usas protector, o ya estarías capado en el hospital".

   "Una basura como tu sería el primero en terminar sin pelotas, ya quisieras tener lo que tengo".

   "Sigue soñando pene de Barbie".

   "Querrás decir pene de Kent, idiota!... Ni siquiera sabes lo que acabas de decir!".

   "Como sea te supero en dotes enano, y Claudia lo debe saber".

   “Así?, pues eso lo veremos... Ya te arrepentirás por todos los insultos!". Pedro comenzó a desvestirse, sus muñequeras, botas salieron volando, y el varón se quitaba el calzón, quedando en calzoncillos, Atónito su rival no daba para  reaccionar.

   "No hagas eso!". El juez le recombino. Mientras Claudia estaba atónita, pero que pretendía ese insensato.

   "Déjenlos!", se escuchaba una y otra vez en el masivo público, que no paraba de animar, las damas se sonrojaban ante la vista del enanito en ropa interior... para muchos el pequeño Pedro era divino, y darían lo que fuera por tenerlo en su habitación.

   Ante los vitoreo de las mujeres en el público, Panamá también comenzó a desvestirse, de inmediato los halagos femeninos aumentaron en intensidad.

   El juez recriminó: "También tú?, no lo hagas!".

   Adriana se coloreo con lo que veía, su hermanito despojándose de la ropa, pero se preocupó de inmediato, pues Pedro estaría vulnerable a un devastador golpe bajo.

   El juez volvió a repetir que no se desnudaran, nadie le prestó atención.

   “Déjenlos pelear como quieran!". Fue la voz de Gustavo Piñeres, quien había vuelto al escenario, ante la orden del directivo, el juez no protestó más.

   Gustavo ya anticipaba lo que pretendía Pedro y estaba de acuerdo, expresó: "Que peleen como quieran, y es mejor sin reglas, que esto sea como una pelea mixta".

   Pedro ya estaba materializando aquello y se desprendía del protector genital, dejando su pene y huevos a la luz del escenario.

   El público volvió a vitorearle, Panamá repetía la acción, estaba de acuerdo, sería sin reglas. Pronto su verga y bolas también bamboleaban a la vista de los asistentes.

   "No lo hagas Pedro!", Claudia estaba preocupada, ahora su Pedrito estaba sin protección, sus testículos podían ser golpeados por su rival, era cierto que Keilor también se hallaba expuesto ahora, pero Pedro había sido golpeado por ella en los huevos en la noche de ayer, y le había dado bastante fuerte, aunque Pedro esta mañana afirmaba que  estaba ya sano, ella no creía eso por completo, sus bolas debían de estar aún sensibles a cualquier dolor, de pegarle Keilor en tales partes, seguro dejaran en grave estado a Pedro, un golpe podría ser decisivo, sin importar que resistencia tenga Pedro en las bolas... no sería una pelea justa!

   Por supuesto Claudia desconocía que Keilor también había recibido su golpe bajo anoche y se exponía a lo mismo que Pedro.

   Ahora ambos peleadores desnudos, Pedro detalló los genitales de su rival, en estado de flacidez no parecía haber diferencia en los falos de ambos Claudia había confesado que el suyo era un poco más largo, por casi nada, obviamente solo una mujer podría decir eso sintiéndolo dentro de ella, pero ahora satisfacía su duda sobre el tamaño testicular de su rival, a plena vista Panamá era poseedor de pelotas de gran tamaño, pero Pedro estaba seguro que las suyas eran más grandes, aunque aquí también cabía el término "Por casi nada".

   "Te volviste gay o qué?, te gusta ver la verga de otro macho?". La interrupción de Keilor enojo a Pedro quien replicó: "Soy bien hombre, y te lo demostraré barriendo el piso contigo, solo veía lo que tienes ahí colgando, para tener idea de cómo eras de antes, porque cuando termine esta pelea, no se verá para nada igual".

   "Enano maldito, a ver quién termina sin huevos, pero serás tú el que no puedas estar con Claudia ni aunque quieras... yo por otro lado estaré gustoso de meterle esto a Claudita". Panamá meneó su verga impunemente; La mujer se coloreó y desvió la mirada.

   Pedro se arrojó contra Panamá, quien le lanzó una patada a cabeza, el pequeño Pedro esquivó el golpe, colocándose debajo de la pierna elevada de Keilor, quien viendo sus huevos descubiertos los cubrió con una mano, Pedro, vio el principal blanco protegido y cambio a un golpe de puño a un lado de la rodilla de su adversario.

   "Maldito!!". Reclamó el puertorriqueño al sentir castigados sus ligamentos articulares.

   Panamá tenía problemas, pero en astucia y experiencia superaba a Pedro...
...De repente Keilor corrió y Pedro fue tras él, justo antes de alcanzarle, Panamá frenó en seco y lanzó la pierna hacia atrás, el talonazo casi a ras del suelo, impactó en la hueva derecha de Pedro Coronado.

   "AAAHHHHHHHHHHHHHHH!!!!!!!!!!". Pedro se agarró los huevos y cayó al suelo rodando. El público obtenía a lo que vino a ver.

   Claudia reclamó por el golpe bajo, el pequeño luchador, logró ponerse de rodilla, solo para recibir una patada en la cabeza; Panamá estaba en ventaja, se ubicó ante Pedro y comenzó a golpearle el rostro.

   "Uno, dos, tres, cuatro...!". Contaba el público mientras el enano recibía una putiza.

   Pedro, quien estaba mareado, tuvo un instante de reacción, cuando Panamá se detuvo y saludó al público… El golpeado sujeto movió con avidez su mano y logro agarrarle las bolas a Panamá.

   "AAhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!!". Fue el estridente alarido de Keilor sintiendo estrujada su masculinidad.

   "Déjalo sin bolas!!". Gritó un aficionado.

   Pedro obedeció, retorció los testículos del puertorriqueño casi luxándose la muñeca, Coronado estaba ahora al mando del pleito.

   De improviso, Panamá lanzó un puño veloz contra las colgantes huevas de Pedro, el golpe fue certero y punzante... Las bolas de Pedro se agitaron con violencia entre sus piernas, estallando la garganta del enano.

   "AAAAyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyy!!!!!!!!".

   El intensísimo dolor, le hizo soltar las gónadas de Panamá, quien las cubrió con sus protectoras manos... ahora las sobaría con dedicación, mientras veía a Pedro caer al suelo adoptando la posición fetal.

   Ambos contendientes estaban incapacitados, agarrándose las doloridas bolas.

   Por casi un minutos se quedaron viéndose uno al otro a los ojos, el público estaba expectante, y el juez estaba por decirles que siguieran peleando, Pero cada quien corrió hacia su adversario, el escándalo en la tribuna era ensordecedor.

   Justo antes de chocar uno frente al otro, ambos de detuvieron... Tanto Pedro como Panamá, extendieron una mano y agarraron con fuerza el escroto de su rival. Todos quedaron atónitos.
                                                                     

   Así empezó un duelo de resistencia, donde cada macho apretaba con todo los huevos del oponente.

"AAAHHHHHHHHHHHH!!!!!!!!!!", "AAAAYYYYYYYYYYYYYYYYYY!!!!", los gritos eran simultáneos.

   Pedro retorcía las gónadas de Keilor, mientras este se centraba en tirar hacia abajo de las bolas del hombrecito.

   Claudia no pudo ver más y se dio vuelta, pobres de su ex y actual novio.

   Adriana animaba a su hermano: "Resiste Pedro... capa a ese miserable!".

   La tortura era insoportable para Panamá, quien arrugaba el rostro como tras consumir algún fuerte cítrico, pero no se daba por vencido, tiro y apretó de los huevos de Pedro quien chillaba como un marrano. Los dedos de Panamá se hundían con saña en la masa escrotal el rival. La gente animaba, pero en especial los varones, desviaban la mirada ante tan inhumano castigo sobre el ring.

   Fue una lucha de resistires, finalmente Panamá fue más débil de bolas, y comenzó a suplicar

   "Deja, deja, dejaaaaa!!!!!".

   Panamá soltó las criadillas de Pedro, y este con un apretón final, le dejó los ojos en blanco. El pequeño le soltó y Keilor se fue de espaldas al ring. Pedro se quedó viéndole, cuando el juez se interpuso y analizó la condición de Keilor... sin duda no podía continuar el pleito.

   La victoria era de Pedro Coronado!. El juez le levantó la mano y el júbilo estalló en el público.

   Pedro se fue de espaldas, exhausto, mientras levantaba una mano, dando a entender que solo era agotamiento. El público casi ingresa al ring, de no ser por el personal de seguridad, estaban satisfechos por la demostración de fuerza y castigo gonadal.

   Adriana bajó hasta el ring, con una gran sonrisa, su hermanito era el ganador, y si bien el motivo de la pelea no le era grato, se alegraba por él.

   El personal del club sacó a Panamá en camilla, el hombre no dejaba de cubrir su entrepierna...

   "AAyyy, mis bolas, ayyyy, ayyyyy...". Casi le brotaban lágrimas de su entrepierna herida e inflamada. Su entrenador le aplicaba spray, cremas lo que fuera para aliviarle pronto tan importante área masculina.

   Aun siendo el perdedor, algunas chicas le pidieron su autógrafo, el engreído tuvo una sonrisa al final.

   En la salida de Pedro, el entrenador le aplicó un spray analgésico; Claudia acompañaría a Pedro al camerino, le dijo: "Que terco eres Pedrito, pero eres mi querido terco".

   "Querida Claudia, tú y solo tú me puedes aliviar este dolor".

   "Siempre te ha gustado mis caricias, parece que tengo buena mano".

   "La mejor...".

   Panamá no volvió a meterse con Pedro Coronado, quien aumentó su fama en el club y a pesar de los regaños consolidó su relación con Claudia.

   Gustavo Piñeres se daba una última dosis de cámara y pronto tomó rumbo al área administrativa, se pasaría algunas horas contando dinero, su preciado dinero... pero las cosas tomarían un giro totalmente inesperado.

FIN.



Gracias.

Comentarios a zatniktiel@hotmail.com




ANEXO.

La celebración de los ganadores de la noche comenzaba, y el público se retiraba, pero mientras esto ocurría, en el área administrativa del club pasaba algo extraño...

...Un vigilante de portería, ante la no respuesta de su colega, fue al área administrativa a buscarle, terminó hallándole en el baño de la sección, estaba en el piso, inconsciente, atado de manos y pies. Una rápida alerta y descubrieron a Camila y Gustavo sin sentido en la oficina de tesorería, y con un faltante del 60% en el dinero de una caja fuerte abierta.
Las autoridades llegaron al club y para entonces los desmayados ya habían recobrado el sentido, una rápida asistencia de paramédicos y no paso a mayores su estado de salud. La primera versión del directivo fue: "Una mujer… fue una mujer enmascarada.... maldita!". Los que escuchaban su versión no podían evitar observar como Gustavo Piñeres no cesaba en quejarse y sobar su entrepierna, sin duda aquella ladrona enmascarada le había golpeado los testículos.

A cargo de la investigación estaría el detective Armando Díaz (Personaje de la saga LA PORRISTA Y EL DESPROTEGIDO/ADOLORIDO JUGADOR) recientemente ascendido, quien interrogaría a los atacados y se propondría atrapar a aquella misteriosa enmascarada.


Nota: El tema de cómo se cometió el robo, el motivo del mismo, la identidad de la ladrona y la investigación policial, serán trama para un futuro relato, y aún más...

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