Veronica enfrenta a errante9191 - Las Bolas de Pablo

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6 ago 2018

Veronica enfrenta a errante9191

Un relato escrito por: ZATN
CONTIENE:
-BALLBUSTING MUJER/HOMBRE

   VerĆ³nica en su laboratorio pensaba en cĆ³mo desquitarse de aquel sujeto Errante9191, quien le habĆ­a insultado en aquel blog. SimultĆ”neamente la joven mezclaba sustancias, al parecer preparaba un compuesto.

   “CĆ³mo se atreve a decirme desquiciada… Debe pagar por su ofensa”. Por fin terminĆ³ de preparar aquello a lo que habĆ­a dedicado su tiempo:

   “Listo, la concentraciĆ³n es la adecuada, sĆ³lo me resta envasarlo”.

   MĆ”s tarde ese dĆ­a, VerĆ³nica, tocaba a la puerta de la residencia de Errante9191.

   “Sorprendido de verme?”.

   “CĆ³mo supiste en donde vivo?”.

   “Ya habrĆ” tiempo para explicaciones, ahora permĆ­teme el paso, no seas maleducado”.

   Tras hacerle pasar, El hombre le cuestionĆ³:

   “A quĆ© has venido?”.

   “No lo anticipas?, he venido a ponerte en tu lugar, tu ofensa pĆŗblica a mi persona fue demasiado para tolerar, asĆ­ que te darĆ© una lecciĆ³n”.

   “De que hablas?”.

   “TĆŗ y yo tendremos un enfrentamiento fĆ­sico, es obligatoria tu aceptaciĆ³n o expresarĆ© pĆŗblicamente tu falta de valor, y cuestionar socialmente la valentĆ­a de un varĆ³n es inaceptable para ustedes verdad?, asĆ­ que es dado por hecho que te enfrentarĆ”s a mĆ­”.

   Lo que expresaba VerĆ³nica dejĆ³ perplejo a Errante9191.

   “Tanto temor te genera el perder en un encuentro fĆ­sico contra una mujer?”.

   “SĆ© que buscas hablando asĆ­, no eres la Ćŗnica lista en el mundo”.

   “Lo admito, buscĆ³ afectar tu ego masculino, es psicolĆ³gicamente una de las primeras fases de la provocaciĆ³n y el mayor origen de conflictos fĆ­sicos en la sociedad”.

   VerĆ³nica se retira la falda y pantaletas, quedando con su Ć”rea pĆŗbica al aire, la joven decide conservar la chaqueta que portaba.

   “No creas que no sĆ© quĆ© pretendes ahora al quitarte la ropa”.

   “Es muy obvio que intento distraerte, independiente de tus preferencias sexuales, la desnudez en su oponente generarĆ” una distracciĆ³n en un cualquier persona, y mĆ”s al ser hembra contra varĆ³n”.

   VerĆ³nica se acercĆ³ un poco a su masculino enemigo.

   “DespuĆ©s de todo en masa muscular y fuerza bruta por gĆ©nero llevo las de perder”.

   “Entonces retrĆ”ctate de a lo que viniste y asunto terminado”.

   “No harĆ© eso, te repito, recibirĆ”s una reprimenda fĆ­sica de mi parte… Aunque debo decirte algo antes de comenzar nuestra pelea…”.

   “Que vas a decirme?, dilo de una vez”.

   VerĆ³nica lanzĆ³ repentinamente un puntapiĆ© contra la entrepierna de Errante9191, quien al ver la patada retrocediĆ³ la pelvis salvando sus genitales del golpe.

   “…querĆ­a decirte que no hay reglas en este combate”.

   “Atacando por sorpresa desvergonzada!”.

   “El personaje Pablo ChacĆ³n en guerreros de arena, en un 87.5% lanzaba el primer ataque, y por el argumento Ballbusting era siempre un golpe a las gĆ³nadas de su oponente”.

   “Tramposa… Y en que quedo eso de no poder golpear en los testĆ­culos por una promesa tuya…”.

   “Tu acusaciĆ³n sobre mi falta de cumplimiento es incoherente, es obvio que esta situaciĆ³n es fuera de los argumentos de las historias de mi persona o personaje, en nuestro actual enfrentamiento todo es permitido, y no tengo prohibiciĆ³n alguna”.

   De repente VerĆ³nica lanzĆ³ un golpe a la nariz de Errante9191, a pesar de ser un golpe de menor fuerza, sintiĆ³ dolor y retrocediĆ³ unos pasos… el trauma le generĆ³ un intenso lagrimeo, por lo que no vio venir el secuencial ataque a su garganta.

   La cientĆ­fica con precisiĆ³n golpea la manzana de adĆ”n de Errante9191, generando que nuevamente se queje.

   “GGaaahhh!!!”.

   “Tu guardia estĆ” completamente centrada en proteger los puntos doloroso que he golpeado… has descuidado tu mayor punto Ć”lgido inferior”.

   VerĆ³nica lanza su mano y agarra los testĆ­culos de su oponente.


   “Tengo tus gĆ³nadas, rĆ­ndete o apretarĆ©… Te lo dije, la promesa no aplica en esta situaciĆ³n”. La joven sostuvo con firmeza el bulto de genitales de ese sujeto, que parecĆ­a no reaccionar “No tienes opciĆ³n, puedo aplicar mucha presiĆ³n sobre tus glĆ”ndulas sexuales, sĆ© que no querrĆ”s eso, asĆ­ que date por vencido… Vamos! debes decirlo, pronuncia las palabras –Me rindo- y liberarĆ© tu hombrĆ­a, hazlo!”.

   “Nunca me rendirĆ©…”.

   “No tienes alternativa, el orgullo masculino es algo inĆŗtil, cede y admite tu derrota…”.

   De repente Errante9191 conecta un rapidĆ­simo golpe de mano abierta contra el rostro de VerĆ³nica, la chica suelta los testĆ­culos del varĆ³n y retrocede cubriĆ©ndose el rostro.

   La cientĆ­fica siente molestia en su visiĆ³n, el golpe le ha afectado la vista.

   “Ahora se invierten las cosas”.

   “Canalla, me tomaste desprevenida”.

   El sujeto aun sobando su garganta, tose un poco intentando aliviar su adolorida zona, pero avanza hacia la temporalmente aturdida joven.

   VerĆ³nica alcanza a ver cerca a su rival y retrocede Ć”gilmente, necesita espacio para intentar algo mĆ”s.

   “Vas a aprender a no meterte con tus mayores mocosa”. El avance de Errante9191 es imparable, viene hacĆ­a ella con todas intenciones de un severo desquite.

   “Aun no me vences, no te confĆ­es sĆ³lo por tu mayor masa muscular”.

   VerĆ³nica saco de un bolsillo de la chaqueta una pequeƱa esfera de vidrio oscuro y la arrojĆ³ contra los pies de Errante9191, un pequeƱo estallido del objeto libera un gas incoloro que rĆ”pidamente asciende hasta el rostro y nariz del rival.

   El sujeto apenas abre la boca de la sorpresa… algo muy desafortunado pues inhala mĆ”s rĆ”pidamente el desconocido gas.

   “Pero que!!!”.

   “Es TRICLOROMETANO, comĆŗnmente conocido como cloroformo, es un somnĆ­fero que preparĆ© en el laboratorio… Debo decirte que es la dosis correcta para dormir hasta un varĆ³n de 125 Kg, el efecto en tu persona serĆ” rĆ”pido y duradero, si mis cĆ”lculos no fallan, dormirĆ”s entre 150 y 180 minutos”.

   El hombre no puede resistir los efectos del gas y termina desplomĆ”ndose al suelo, totalmente dormido.

   VerĆ³nica se acerca a Errante9191. 

   “Te he vencido!, tu error fue pensar que en una pelea tu oponente solo usarĆ” sus extremidades en ataques basado en fuerza cinĆ©tica, cariƱo los golpes no son la Ćŗnica forma de obtener la victoria, existen una multitud de armas utilizables, aunque personalmente prefiero la no violencia para lograr la victoria”.

   VerĆ³nica le retira el pantalĆ³n a Errante9191 y le arrastra; Mientras le conduce a un lugar especĆ­fico, observa los ahora desnudos genitales de su rival.

   “Centraste tu atenciĆ³n en esperar un ataque mĆ­o contra tus glĆ”ndulas reproductoras, admito que son efectivos los traumas genitales en los varones, pero soy mĆ”s recursiva”.

   Tiempo despuĆ©s…

   Errante91 abre los ojos, la cabeza le da ligeramente vueltas… de inmediato se siente desnudo, una rĆ”pida mirada y se da cuenta que estĆ” en cama sin prenda alguna, repentinamente se percata que le tocan el pene, al inclinar un poco la cabeza observa a VerĆ³nica entre sus piernas acariciĆ”ndole pene y testĆ­culos.

   “Que haces?… dĆ©jame!”. Un intento de levantarse se frustra al verse atado de manos y pies a los cuatro extremos de la cama.

   “No te podrĆ”s mover, te atĆ© fuertemente”.

   VerĆ³nica se incorporĆ³ y acostĆ³ junto a Ć©l, colocando los labios cerca de su rostro, mientras una mano llevada contra su entrepierna se dedicaba a palparle el miembro viril.

   “Por cierto, veo que usaste tus propias gĆ³nadas como ejemplo para crear a los personajes varones de la familia ChacĆ³n… Ahora entiendo porque todos son de testĆ­culos tan grandes”. La cientĆ­fica comenzĆ³ a palpar los huevos del atado joven.

   “SuĆ©ltame, estas demente!”.

   “Estas bajo mi poder, de querer podrĆ­a ser amable…”. En ese momento le dio un ligero beso en la mejilla “…o ser ruda!”. Una de sus manos bajĆ³ a los testĆ­culos del rehĆ©n apretĆ”ndolos levemente.

   “Todo depende de ti… como quieres que te trate Errante91?, amable o ruda?”.

   El hombre se hallaba atĆ³nito ante su incĆ³moda situaciĆ³n, No daba para decir algo.

   “Bueno ya que no quieres hablar, entonces iniciarĆ© con el desquite que te habĆ­a prometido y que te ganaste con tu actitud”.

   VerĆ³nica se arrodillo ente las piernas de Errante9191, y descargĆ³ con rapidez un colocado puƱo en la masa escrotal del varĆ³n.

   El alarido del sujeto es intenso.

   “AAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHH!!!!!”.

   Dos certeros y consecutivos golpes de puƱo impactan en cada testĆ­culo de Errante9191.

   “OOUGHH!!!”…”OOHHH!!!”

   Brincos de abundante y espesa saliva son evidenciables tras los impactos y el dolor consiguiente.

   “Ahora veo que la resistencia de los ChacĆ³n a los traumas gonadales si es completa ficciĆ³n, para nada es acorde a tu fisiologĆ­a genital… querido Errante9191, eres muy sensible!”.

   Nuevo puƱo en los testĆ­culos.

   “AAAAyyyyy”.

   “Ahora dime, Errante9191 quieres que pare de golpear tu reservorios de gametos?, solo debes decir que te rindes y cesaran los golpes”.

   Errante9191, estaba casi ido de sĆ­ mismo, el dolor era intenso, y se humedeciĆ³ los labios con la lengua, parecĆ­a que fuera a decir algo…

   “Antes que respondas, solo dĆ©jame decirte algo… Despierta, Despierta”.

   En ese momento Errante9191 abriĆ³ sus ojos, se hallaba en su cama, pero no se sintiĆ³ atado, que habĆ­a pasado?.

   “Fue un sueƱo?”.

   De pronto sintiĆ³ la caricia en su escroto, a su lado estaba VerĆ³nica, ¿CĆ³mo no la habĆ­a visto?.

   Los dedos de la cientĆ­fica masajearon con delicadeza sus testĆ­culos.

   “Que ha pasado, que me hiciste?”.

   “Que te hice?, nada, solo despierta… despierta mi Errante9191… Despierta…Despier… Desp...”.

   El rostro de VerĆ³nica se hizo borroso y comenzĆ³ a desvanecerse.

   Errante9191 abriĆ³ los ojos, y una vez mĆ”s estaba en su cama, VerĆ³nica no estaba y sus extremidades se hallaban libres, de pronto centrĆ³ su atenciĆ³n en su telĆ©fono mĆ³vil junto a su cuerpo, lo desbloqueĆ³ y mirĆ³ en la pantalla.

   -VERƓNICA ENFRENTA A ERRANTE9191-

   Por fin se dio cuenta de que sucedĆ­a, se habĆ­a quedado dormido leyendo aquel relato que ZATN ( zatniktiel@hotmail.com ) le habĆ­a enviado…
…Todo habĆ­a sido un sueƱo!

Fin.

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