SUPERMAN HOOD (3/9): La confianza de un Dios. - Las Bolas de Pablo

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3 may 2020

SUPERMAN HOOD (3/9): La confianza de un Dios.

Escrita por: Fercho MX
CONTIENE: BALLBUSTING HOMBRE/HOMBRE

   Rodrigo es un SuperhĆ©roe conocido por todos como Superman Hood, manifestĆ³ algunos poderes siendo un niƱo, pero una profecĆ­a le revelĆ³ que par salvar al mundo, tenĆ­a que robar los poderes a su hermano mayor golpeĆ”ndolo en las bolas y asĆ­ lo hizo, pasĆ³ su adolescencia cautivo en Heroland, su hogar, una isla en el mar mediterrĆ”neo, a los dieciocho aƱos escapĆ³ y actualmente es un famoso superhĆ©roe, su principal aliado y mentor es Ted Tavira un hĆ©roe sin super poderes llamado Blue Rage, quien es un experto atleta y artista marcial.

   Durante dos aƱos, Rodrigo entrenĆ³ arduamente con Blue Rage. MejorĆ³ mucho sus habilidades de combate, pero sobre todo adquiriĆ³ la destreza de suprimir sus propios poderes, las tĆ©cnicas de meditaciĆ³n de Teodoro eran muy efectivas.

   Esto era particularmente Ćŗtil pues al suprimir su sĆŗper fuerza, Rodrigo podĆ­a ejercitarse con pesas y mancuernas comunes y lograr trabajar su musculatura, no necesitaba buscar objetos realmente pesados como lo venĆ­a haciendo. Ted era un hombre musculoso y esbelto de 1.80 de estatura, pero Rodrigo media 1.95 y tenĆ­a mayor masa muscular que su amigo y mentor.

   Durante los entrenamientos Rodrigo suprimĆ­a su invulnerabilidad para recibir daƱo en todo el cuerpo, excepto en una parte muy importante: los testĆ­culos, temĆ­a perder sus sĆŗper poderes si recibĆ­a un golpe siendo voluntariamente vulnerable. Ted estaba convencido de que la principal variable de su debilidad no era en si el recibir un golpe en los huevos, sino que Ć©ste fuera dado por un familiar sanguĆ­neo. Finalmente un dĆ­a convenciĆ³ a Rodrigo de poner a prueba esta teorĆ­a.

   Ambos hombres solĆ­an vestir ropa de licra o tela deportiva durante todos los entrenamientos. Rodrigo abriĆ³ el compĆ”s hasta la altura de su hombros y se concentrĆ³ para anular su invulnerabilidad.

   –Hazlo –le dijo a Ted. El hombre le dio una palmada moderada en las bolas.

   Rodrigo experimentĆ³ por primera vez el dolor que sentĆ­a un hombre al recibir un golpe en esa parte y comprendiĆ³ por quĆ© era tan debilitante, el chico dio un grito grave y se agachĆ³ sujetĆ”ndose las bolas, quedando en cuclillas.

   –¿Y bien? –preguntĆ³ Ted. Rodrigo reactivĆ³ su invulnerabilidad y descubriĆ³ que no habĆ­a perdido sus poderes.

   –Funciona, no lo puedo creer Ted, ¡funciona!

   –Lo sabĆ­a, si todo es como me lo platicaste, tĆŗ a pesar de tener sĆŗper velocidad no tenĆ­as sĆŗper fuerza como para daƱar a tu hermano, lo que lo afectĆ³ no fue el impacto en las gĆ³nadas, sino el que fueras un familiar directo. Lo mismo aplica, aunque seas vulnerable y sientas dolor, si no es un familiar el que te golpea, tus poderes no se verĆ”n afectados, el dolor no es una variable, la condiciĆ³n sanguĆ­nea si.

   –Eres la persona mĆ”s inteligente que conozco Ted –dijo Rodrigo sujetĆ”ndose las bolas. Pues aunque recuperaba su poderes el dolor no desaparecĆ­a.


   Los hombres siguieron poniendo a prueba esta teorĆ­a, Ted le dio una palmada mĆ”s fuerte, el chico no perdiĆ³ sus poderes, luego le dio un puƱetazo directo que lo hizo caer de rodillas chillando pero tampoco perdiĆ³ sus poderes, posteriormente le dio una fortĆ­sima patada que le hizo caer al piso contraĆ­do en posiciĆ³n fetal, aĆŗn asĆ­ no perdiĆ³ sus poderes, estando en el piso Ted sujetĆ³ sus tobillos y aplastĆ³ sus bolas con el talĆ³n y lo golpeĆ³ en repetidas ocasiones, el chico se retorcĆ­a de dolor, sin embargo al comprobar despuĆ©s si aun conservaba sus poderes, estos todavĆ­a estaban ahĆ­.

   Finalmente Ted sujetĆ³ cada uno de sus testĆ­culos con una mano y comenzĆ³ a apretarlos, Rodrigo gritaba y gemĆ­a, incluso le suplicĆ³ que se detuviera, pero Ted querĆ­a estar mĆ”s seguro, Rodrigo no resistiĆ³ mĆ”s y reactivĆ³ sus sĆŗper poderes como medida de defensa.

   A partir de ese momento, en cada sesiĆ³n de sparring y lucha,  Rodrigo suprimĆ­a su invulnerabilidad sin restricciones, Ted aprovechaba esto y constantemente atacaba las bolas de Rodrigo para llevarlo a la rendiciĆ³n.  Con una fortĆ­sima patada lo hacĆ­a caer al piso y a partir de ahĆ­ lo sometĆ­a, o luchando en el piso, lo golpeaba repetidamente en las bolas hasta que el chico se rendĆ­a o debido al dolor le podĆ­a aplicar alguna llave para rendirlo.

   Durante una lucha en piso Ted sujetĆ³ a Rodrigo de las bolas y comenzĆ³ a apretarlas, el chico gritaba y se retorcĆ­a, pero notĆ³ que su mentor dejaba vulnerable su entrepierna, el chico extendiĆ³ su mano y apretĆ³ tambiĆ©n las bolas de Ted con todas su fuerzas.

   –¿Por quĆ© tardaste tanto? –preguntĆ³ jadeante Ted– AHHHH, llevamos semanas luchando de esta manera y es la primera ves que te AHHHtreves a agarrAAAAHrme  las bolas.

   –Ahhh, no se me hace ahhhlgo heroico, ahhh, ni correcto y te respeto mucho como para hacerlooo ahhh maldito, perooo… –Rodrigo apretĆ³ con mĆ”s fuerza, era mĆ”s joven y fuerte que Ted. Su mentor lo soltĆ³ y rodĆ³ quedando de espaldas a su lado sobĆ”ndose las bolas– … supongo que es necesario.

   –Me confiĆ© –dijo Ted, con el rostro fruncido– como nunca me habĆ­as atacado ahĆ­, no me protegĆ­, baje la guardia, pero no va a volver a ocurrir, si me quieres golpear en las bolas tendrĆ”s que buscar la oportunidad para hacerlo y no te la voy a dar –dijo Ted– eso mismo espero que hagas.

   Ambos continuaron luchando, hasta que finalmente Ted le aplicĆ³ un llave mataleĆ³n a Rodrigo quien se rindiĆ³ y palmeĆ³ el brazo de Ted, pero este siguiĆ³ hasta dejarlo inconsciente.

   En el suelo desmayado, Ted tenĆ­a al ser mĆ”s poderoso del mundo, a sus pies yacĆ­a un Dios. El hombre de 38 aƱos admirĆ³ la musculatura del chico y colocĆ³ su pie sobre su pecho, despuĆ©s sobre su entrepierna.

   Este chico confiaba en Ć©l a tal grado que se volvĆ­a vulnerable para entrenar y le permitĆ­a llegar a donde ningĆŗn otro mortal podrĆ­a. Seguramente ante la inminente inconsciencia Rodrigo podrĆ­a haber activado su invulnerabilidad o algĆŗn otro sĆŗper poder, como lo hizo la primera vez que le apretĆ³ las bolas, pero no lo hizo, resistiĆ³ y se dejĆ³ someter hasta la inconsciencia. Ted se arrodillĆ³ entre las piernas de Rodrigo y admirĆ³ los 110 poderosos kilos de mĆŗsculo que yacĆ­an inmĆ³viles ante Ć©l, luego bajĆ³ la cabeza para reflexionar.


   “PodrĆ­a asesinarlo si quisiera, podrĆ­a romperle el cuello durante un entrenamiento o dispararle o clavarle un cuchillo en este momento que estĆ” inconsciente, yo podrĆ­a haber sido un villano con un plan a largo plazo para ganarme su confianza, sĆ³lo para acabar con Ć©l, la confianza que el chico me otorga es una gran responsabilidad para mi. Tal vez es por que creciĆ³ recluido y sin contacto con los suyos o por que no encajaba en este mundo de humanos, lo cierto es que Rodrigo era un hombre solitario hasta que me conociĆ³, en mi, en este hombre deposita ciegamente su confianza. ¿Y si lo hace con alguien mĆ”s? Esto podrĆ­a ponerlo en un serio peligro. El chico no debe ser tan ingenuo, es peligroso para Ć©l”

   –SĆ© lo que piensas, pero no soy un estĆŗpido chico solitario que confĆ­a ciegamente en ti o en cualquiera, me consta que no eres un enemigo –dijo Rodrigo aun recostado, ya habĆ­a recuperado la consciencia– al contrario, eres mi mejor amigo.

   –Me tranquiliza escucharlo –respondiĆ³ Ted– ¡Espera! ¿TambiĆ©n lees la mente? ¿tienes ese poder?

   –No, aun no, mĆ”s bien es empatĆ­a, es reciente, pero puedo sentir lo que otra persona siente, sentĆ­ tu preocupaciĆ³n y compromiso y eso me hizo deducir lo que pasaba por tu mente –explicĆ³ Rodrigo– no te preocupes por mi Ted.

   –Bueno, continuemos con el entrenamiento –respondiĆ³ el mentor.

   Entre los poderes de Carlos que ahora poseĆ­a Rodrigo se encontraba la manipulaciĆ³n de energĆ­a y materia. Rodrigo aprendiĆ³ que era capaz de arrebatar la energĆ­a de sus oponentes, puso a prueba esta cualidad con Ted quien caĆ­a inmĆ³vil y exhausto ante Ć©l. Sobre todo aprendiĆ³ a controlar su propia energĆ­a y a entenderla. Esta habilidad es la que le permitiĆ³ aprender a suprimir sus poderes a voluntad en tan solo dos aƱos.

   AprendiĆ³ que efectivamente de sus gĆ³nadas fluĆ­a la energĆ­a base de cada uno de sus poderes y era capaz de manipular con meditaciĆ³n avanzada esa energĆ­a en su estado mĆ”s puro, Ć©l podĆ­a concentrar  la fuerza de cada habilidad en sus bolas para potenciar una en especĆ­fico, tambiĆ©n era capaz de acumular una descomunal cantidad de energĆ­a que segĆŗn estimaban ambos amigos, podĆ­a destruir un planeta gigante o al sol. Con el tiempo, este aprendizaje serĆ­a el activo mĆ”s importante con el que contarĆ­a al enfrentar la amenaza galĆ”ctica que llegarĆ­a para destruir la tierra.

   La naturaleza de los sĆŗper poderes de la gente de Heroland era un misterio, ¿eran algo fĆ­sico? ¿eran algo mĆ”gico? ¿cuĆ”l era realmente el origen de estas habilidades? Pronto lo averiguarĆ­an.

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